El 'hechizo' de Ousmane Dembélé

No solo está modificando la opinión pública de una parte del barcelonismo que ya lo había crucificado, sino que ha logrado regresar a la selección francesa dos años y medio después y ser el gran brote verde dentro de la mediocridad. Ousmane Dembélé está viviendo, probablemente, los mejores meses de su carrera deportiva. Y los está saboreando tras dos temporadas para el olvido, en los que ha ido de lesión en lesión y de un episodio extradeportivo a otro.

El galo, que está siguiendo un plan específico a nivel físico desde el inicio del curso, ha dado un cambio en ese apartado y a nivel mental. Está más enchufado que nunca dentro de los partidos, defiende, presiona, se faja. Todo lo que no habíamos visto hacerle hasta ahora está explotando en la figura de un futbolista que tuvo una irrupción prematura (quizás demasiado) y que continúa siendo muy joven. Pero con la ventaja de la experiencia acumulada en situaciones adversas y sabiendo lidiar con las críticas de todos los sectores.

Titular indiscutible ahora mismo para Koeman (de justicia es dar al holandés la cuota de mérito que se merece en esta eclosión del de Vernon), Ousmane ha dado un salto tanto en lo palpable como en lo intangible. A esa imprevisibilidad (es capaz de salir por cualquiera de los dos costados y soltar un latigazo igual de potente con ambas piernas) que nos había dejado a cuentagotas le ha añadido una regularidad y una constancia que han conseguido incluso que no veamos los partidos temiendo que en cualquier momento pueda romperse.

Convenciendo a Deschamps

Ese buen hacer le valió al extremo para recibir la llamada del seleccionador galo. Tras casi dos años y medio 'apartado' de 'Les Bleues', Dembélé regresó a una convocatoria en la última ventana de selecciones. En el primer encuentro ante Ucrania, Deschamps lo metió de revulsivo ante el enrocamiento del rival. Ya contra Kazajistán sí salió de inicio el francés, que anotó el 0-1 y fue de los mejores en una Francia que ha estado gris en esta última prueba antes de la Eurocopa.

Tanto es así, que la figura de Dembélé ha ocupado las principales portadas de los rotativos galos. Destacan su vuelta, la bocanada de aire fresco que representa en un equipo muy plano y que apunta a titular de cara a la gran cita del próximo mes de junio. Ousmane ha conseguido 'hechizarlos' a ellos también...