Diez años del referéndum del Espai Barça

Hoy hace una década, los socios aprobaron el proyecto. Lo recuerda el entonces presidente, Josep Maria Bartomeu

Avance entrevista a Gündogan

El Barça presenta las novedades del nuevo Espai Barça

El Barça presenta las novedades del nuevo Espai Barça / FCB

Ferran Correas

Ferran Correas

Mientras las grúas trabajan en el Spotify Camp Nou y el primer equipo juega en el exilio de Montjuïc, este viernes se cumplen exactamente diez años del referéndum del Espai Barça. El proyecto presentado por el entonces presidente del FC Barcelona, Josep Maria Bartomeu, era aprobado por los socios. De los 118.578 que estaban convocados a las urnas, ejercieron su derecho a voto 37.535, un 31,65% del total. El proyecto recibió el apoyo de 27.161 socios, mientras que 9.589 votaron en contra.

"Era un proyecto muy trabajado, lo veníamos trabajando desde el 2011. Se estudió hacer un estadio nuevo en la zona universitaria o reformar el Camp Nou. Nos decantamos por la segunda opción. Fue el segundo referéndum de la historia del club y fue un gran día. Jordi Cardoner y Pere Jansà tuvieron la idea de llevar las votaciones fuera del estadio. Se habilitaron unas carpas y fue una fiesta de barcelonismo. La organización fue perfecta, fue un referéndum modélico", recuerda Bartomeu.

El expresidente del Barça explica que aquella votación sirvió un poco de plebiscito a su figura. "Sandro Rosell había dimitido unos meses antes y decían que no era un presidente legítimo. Eran tiempos difíciles. El entorno estaba movido y hay que recordar que cinco días antes del referéndum llegó la sanción de la FIFA, pero lo sacamos adelante".

El Espai Barça debía costar 600 millones de euros, una tercera parte llegaba de un crédito, otra tercera parte de una empresa que pusiese nombre al estadio y la tercera de los propios ingresos del Espai Barça. Las obras de remodelación del Spotify Camp Nou; sin embargo, no empezaron hasta el pasado verano, aunque hubo una avanzadilla en diciembre del 2022 coincidiendo con el Mundial de Qatar.

Grúas en las obras para reconstruir el Camp Nou.

Grúas en las obras para reconstruir el Camp Nou. / JORDI COTRINA

Causas del retraso

El retraso ha sido importante y ha afectado a la economía del club. "Se encalló por varias razones", explica Bartomeu. "Lo teníamos todo atado con el alcalde Trías, pero cuando Ada Colau llegó a la alcaldía se paró todo. Nos dijo que debíamos empezar de cero. Cuando el PSC entró en el gobierno de Barcelona, en el 2016, todo se reactivó, pero entonces llegó el 155", explica el expresidente del Barça.

En el 2018, se consiguió un acuerdo de ciudad que debía desbloquearlo todo, pero fue denunciado por la CUP. "Volvió a quedar paralizado en espera de la resolución judicial. En abril del 2020 teníamos pensado hacer un nuevo referéndum porque el presupuesto se había elevado hasta los 815 millones, pero llegó el Covid", recuerda Bartomeu, que asegura que en diciembre de ese año, se logró por fin la licencia. Según Bartomeu, el nuevo presidente, Joan Laporta, tenía seis meses para ir a buscarlo, pero no fue porque decidió hacer unas modificaciones.

De todos modos, se siente orgulloso de que "el proyecto actual sea básicamente el nuestro. Se ha modificado la tercera gradería, que se ha tirado, para poner los palcos entre la segunda y la tercera, cuando con nosotros estaban entre la primera y la segunda", explica el expresidente, que sí recuerda que mientras ellos hacían la reforma en tres años y se seguía jugando en el Camp Nou, la directiva actual ha preferido irse a Montjuïc para ir más rápido.

El proyecto votado hace diez años por fin está en marcha. Con algunas modificaciones y con un coste de 1.450 millones de euros.