El Barça ya se plantea alguna rescisión de contrato

El Barça va a comenzar a agilizar su plan y la prioridad absoluta es la operación salida que puede afectar entre 10 y 12 jugadores. Es necesario para rebajar masa salarial, pero también para dejar plazas libres para que los fichajes puedan tener su dorsal.

Se comienzan a vivir días de locura en el área deportiva, porque ya urge comenzar a llegar a acuerdos y, con la aplicación de las palancas, el club comienza a plantearse ya alguna rescisión de contrato necesaria. El Barça está dispuesto a dar cartas de libertad a algunos jugadores, pero también contempla alguna rescisión forzosa en algún caso que se estanque porque los futbolistas se nieguen a salir.

Parte del dinero que se podrá utilizar para el mercado de fichajes irá a ayudar en el pago de fichas con cesiones y también a intentar llegar a acuerdos con indemnizaciones de rescisión de contrato si las cosas se complican. El Barça necesita liberar dorsales de forma urgente y a partir del 1 de julio, el club comenzará a tomar medidas drásticas.

Uno de ellos puede ser Umtiti, que tiene el interés de varios clubs franceses para quedárselo en propiedad siempre que tenga la carta de libertad. Y el futbolista aceptaría con una rescisión de contrato percibiendo buena parte de las cantidades económicas que le quedan por percibir en su contrato.

Neto atajó el peligro del Cornellà

Otro caso que está en estudio en estos momentos es el de Neto. Le queda solo un año de contrato y el club quiere darle salida sí o sí. Su ficha es alta, pero el club le va a dar todas las facilidades del mundo e, incluso, se estudia una rescisión ya que no hay ofertas de traspaso por él.

El brasileño quiere salir para jugar y puede haber acuerdo con compensación económica si encuentra equipo. En España tiene dos ofertas, pero debe salir libre y sus agentes están intentando avanzar con el Arsenal.

El Barça también podría tomar alguna medida drástica con algún futbolista que se niegue a salir de forma categórica. Por el momento parece que la mayoría de descartados aceptarán marcharse siempre que no pierdan nada de su salario.