Xavi: Trazando un Barça sin Ousmane Dembélé

Se ha resistido. Ha apretado el que más. Ha insistido hasta la saciedad. Pero, finalmente, Xavi empieza a asumir que no podrá contar con una de sus armas favoritas en su proyecto. Ousmane Dembélé, cuyo contrato expira el próximo 30 de junio, cada vez es más probable que no acepte la oferta de renovación. Desde su entorno ya se transmitió que la última propuesta del club tampoco les satisfacía. Y, por parte del Barça, el desgaste es absoluto. No se moverán las posiciones. Y todo va encaminado a terminar muriendo.

Como comentábamos, si alguien ha puesto de su parte para que los dos lados se entendieran, ese ha sido el de Terrassa. Lo 'condonó' después del que el Barça, con Mateu Alemany al frente, hiciera un amago de apartarlo en enero tras no atender a las ofertas de la entidad catalana. El hastío llegó a tal punto que tuvo que ser el entrenador el que reivindicara poder usar a la que consideraba una de sus mejores armas. Rueda de prensa tras rueda de prensa, Xavi ha defendido a ultranza a Ousmane, ha puesto su figura en los altares, tachándolo de diferencial. Siempre esperando que pudiera convencerle poco a poco para que entendiera que lo mejor para él es seguir aquí, bajo su auspicio.

PASAR PÁGINA...Y NO MIRAR ATRÁS

Pero el entrenador vallesano hace días que ha asumido que tiene que pasar página. Dembélé, salvo giro radical de guion, no estará en su roster la próxima campaña. Una vez asimilado, hay que trabajar en las alternativas, mirando al frente. La primera buena noticia al respecto, sin duda, el desatasco de las famosas 'palancas'. Algo que, poco a poco, no mañana ni pasado, irá superando etapas hasta el punto de que habrá líquido para fichar. Así lo comentó Laporta en asamblea y así lo ha ido pregonando a los cuatro vientos en esta semana de 'tournée' mediática Eduard Romeu.

Opciones. Sin Dembélé y sin Adama es evidente que el Barça pierde desequilibrio y desborde. Dos extremos puros que ya no estarán. Es indudable que hay que fichar. Aunque termine llegando Lewandowski y Ferran pase definitivamente a un costado. Sería el izquierdo. Raphinha es uno de los grandes objetivos de mercado. Pero esas altas exigencias del Leeds (unos 50 'kilos') lo dificultan todo. Si ya te gastarás unos 40 (yendo bien) por 'Lewy', pensar en otros 50 por el extremo brasileño es tirar muy alto.

RAPHINHA...Y OPCIÓN DI MARÍA

También porque hay otras prioridades de mercado. Como el central. En ese sentido el nombre de Ángel di María cobraría sentido. El 'Fideo' acaba contrato en el PSG y, al parecer, estaría encantado de vivir en Barcelona. Hay una oferta en firme, sólida, de la Juventus. Pero si el Barça se decidiera, Ángel tendría números de llegar. Obviamente, sus 34 años no son lo que se podría decir un proyecto de futuro, pero te tapa un agujero durante una o quizás dos temporadas mientras vas recuperando músculo económico.

Si algo ha demostrado el argentino hasta ahora es profesionalidad y calidad. Un extremo de la vieja escuela. Con Lewandowski, Ferran y Memphis, sería un ataque más que apañado. Eso sí, repetimos, siempre teniendo claro que a corto plazo tendrás que seguir rearmándote para rejuvenecer ese flanco de ataque.