El Barça no va de farol

La de ayer fue la quinta goleada con un 'póker' que logra el equipo en los últimos nueve partidos

La exhibición es un aviso para el Galatasaray... y para el clásico del próximo domingo ante el Real Madrid

Resumen, goles y highlights del FC Barcelona 4 - 0 Osasuna de la jornada 28 de LaLiga Santander

Ivan San Antonio

Ivan San Antonio

Esto no va de datos, pero el Barça suma 28 de los últimos 36 puntos en LaLiga, donde no pierde desde el pasado 4 de diciembre, quienes llegaron en enero para reforzar la plantilla han marcado ya doce goles y, lo más importante, en los últimos nueve partidos, los de Xavi han logrado un ‘póker’ en cinco de ellos, ante Atlético, Valencia, Nápoles, Athletic y Osasuna. Esto no va de datos, pero es evidente que el Barça no va de farol.

El equipo que está costruyendo Xavi juega con las cartas encima de la mesa. No engaña a nadie. Su apuesta es el fútbol de ataque, el de posición, esa manera de entender este deporte que logra dibujar una sonrisa de oreja a oreja al Camp Nou. Su mano ganadora es la única forma en la que el Barça se muestra cómodo sobre el tapete, sin trampas, “sin cuentas”, como afirmaba el técnico en la previa ante Osasuna. Tampoco lucen cartones extraños ni hay nada que asome por la manga, que sigue siendo, pese a todo, estrecha.

LaLiga es el camino a Itaca, un destino utópico, un destino imposible, pero no está permitido dejar de caminar. Cuando eso ocurre, llega el Galatasaray y se lleva un empate sin goles del Estadi que obliga a jugársela en Estambul. Un resultado cuya única explicación es creer que ya está todo hecho, que los dieciocho goles celebrados en los últimos seis partidos llegan por inercia. Y el Barça, pese a estos números, no va sobrado. Está exactamente dónde el proyecto de Xavi tenía previsto que estuviera, en ese peldaño anterior a convertirse en un equipo que juega de memoria, que alcanza una velocidad de crucero y que está capacitado para competir con cualquiera. No son los datos, sino las sensaciones, algo tan volátil, pero a la vez imprescindible y necesario para agarrar la calculadora en el futuro siempre que sigan caminando hacia la utopía. “Mi cuenta es mañana”, decía Xavi antes de medirse a Osasuna. Hoy sus cuentas son el Galatasaray, rival que permitió al Barça aprender una de esas lecciones que no deben olvidar: nadie gana sin competir. El Barça no va de farol y en la mesa de juego ya están sentados los turcos... y el Real Madrid.