El Barça se reivindica con un partidazo ante el PSG y duerme líder

Luka Cindric jugó con maestría para el equipo

Luka Cindric jugó con maestría para el equipo / DAVID RAMÍREZ

David Rubio

David Rubio

El FC Barcelona se ha encaramado a la primera plaza del Grupo A de la Champions tras imponerse con autoridad en un partidazo este sábado al Paris Saint-Germain (36-32).

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CHAMPIONS LEAGUE

36
32
Alineaciones
FC BARCELONA, 36
(19+17): Pérez de Vargas (p.), Cindric (2), Fabregas (2), Palmarsson (4), Dika Mem (6), Víctor Tomàs (1), Ariño (5) -siete inicial-, Möller (p.s.), Entrerríos (4), Sorhaindo, Aleix Gómez (8, 3p.), Thiagus Petrus (1), N'Guessan (2) y Lasse Andersson (1).
PARIS SAINT-GERMAIN, 32
(15+17): Gérard (p., 1'-38' y 55'-60'), Luka Karabatic (8), Nikola Karabatic (1), Viran Morros (1), Remili (4, 1p.), Ntanzi (2), Sigurdsson (4) -siete inicial-, Corrales (39'-54'), Syprzak (5), Abalo (3), Kounkoud (3) y Nahi (1).

De esta forma, loss azulgranas pasan a liderar la tabla con ocho puntos en cinco jornadas, los mismos que el cuadro galo y uno más que un Flensburg que disputa su partido este domingo.

De esta forma, el cuadro catalán deja definitivamente en el olvido la derrota en la primera jornada en la pista del Pick Szeged y reafirma que sigue creciendo a partir de la mejoría defensiva.

Importantes bajas en el PSG

En el cuadro blaugrana la baja del extremo izquierdo danés Casper Mortensen desde enero es muy importante, este sábado los mayores problemas en este sentido eran para un PSG en el que faltaban el central noruego Sander Sagosen y el lateral danés Mikkel Hansen.

Estos problemas en la primera línea fueron pasando factura al campeón galo a medida que pasaban los minutos frente a un Barça que también fue ajustando la defensa y pudo correr como le gusta a partir del 15'.

Los primeros 15 minutos fueron de igualdad total. Ninguno de los dos equipos lograba imponer su ritmo y los goles se sucedían con claro dominio de los ataques sobre las defensas.

Con el incombustible exazulgrana Sigurdsson y un Raúl Entrerríos que no le va a la zaga como estiletes, los primeros tres parciales hablan por sí solos (3-3, 6-6 y 9-9).

El Barça toma el mando

Sin embargo, el PSG supo mover bien la pelota en ataque en las siguientes acciones y, con tantos de Ntanzi, el exbarcelonista Syprzak y Remili de penalti, tomó dos goles de ventaja en el 19' (10-12).

A partir de ese momento, el Barça supo llevar el partido a su terreno y en los últimos 10 minutos anotó casi tantos goles (nueve) como en los 20 primeros (10).

La entrada de Thiagus Petrus ayudó a mejorar la defensa, lo que unido a los aciertos de Gonzalo Pérez de Vargas permitió a Aleix Gómez liderar con cuatro goles unos minutos sensacionales.

Con un parcial de 4-2, el Barça dio la vuelta al marcador (14-10) y consiguió mantener esa renta al final del primer acto gracias a un tanto de Dika Mem prácticamente sobre la bocina (19-15).

Un Barça coral

Esa dinámica se mantuvo vigente en los primeros minutos de la segunda parte, con un Barça que se gustaba en ataque y en defensa ante un gran rival que echaba de menos a Sagosen, Hansen y Toft Hansen.

Tras el segundo gol seguido de Luka Karabatic (22-19), el equipo de Xavi Pascual logró un parcial de 3-0 para adquirir una renta de seis tantos (25-19) que comenzó con un sensacional gol de Palmarsson y culminó Ariño al aprovechar un rechace.

Lejos de conformarse, el Barça demostró que estaba decidido a reivindicarse y a dar un puñetazo encima de la mesa de la Champions. Tanto, que obligó a Raúl González a pedir el segundo tiempo muerto seguido tras el quinto gol de un Aleix Gómez que acabó con ocho (29-22).

Con 30-22, el PSG trató de reaccionar atacando con siete y mejoró a las órdenes de Remili como central. Los franceses circularon bien y terminaron aprovechando su superioridad numérica por el centro.

Con Luka Karabatic haciendo de Nikola (siete goles casi sin fallo) y con 33-28 en el marcador a seis minutos del final, Xavi Pascual paró el partido y recordó a sus jugadores que no olvidasen el 'goal-average'.

Al final, 36-32 con un 'desatado' Syprzak en los últimos minutos, un resultado claro que quizá no refleja del todo la superioridad que mostraron los locales durante dos terceras partes del choque.