Aíto :"Pesic ha dado un impulso y me alegro por él y por el Barça"

A sus 71 años, Aíto García Reneses, toda una leyenda en los banquillos, afronta un reto nuevo lejos de la ACB concretamente en la Bundesliga alemana. Su dilatada experiencia le permite, desde su atalaya, tener una perspectiva impagable sobre lo humano y lo divino que rodea al basket.

¿Qué tal su adaptación a Berlín, a la vida en un nuevo país? ¿Qué hace en el tiempo libre que le deja el basket?

A nivel de clima, el pasado invierno fue duro. Luego en este momento muy bien. Lo más importante es que el ambiente del equipo, que me ocupa mucho tiempo, es excelente. Intento conocer Berlín, ir a museos. Es una ciudad muy interesante. Pero cuando tengo tiempo libre lo que procuro ante todo es desconectar.

El Alba Berlín está disputando los play-off (1-1 contra el Oldenburg) después de acabar segundo en la fase regular. ¿Aspiraciones? ¿Se puede soñar con ganar la BBL?

Soñar siempre se puede soñar. Pero lo primero es lograr pasar a semifinales, que no será fácil. Tengamos en cuenta que el Oldenburg fue finalista de la Buendesliga la pasada temporada. En cuanto a mi equipo lo mejor ha sido el progreso muy grande que ha tenido el colectivo desde el inicio de temporada. Los jóvenes están jugando y los más veteranos como Sikma o Siva están rindiendo a un gran nivel.

Es su primera temporada en el Alba y le nombran entrenador del año en Alemania

Una alegría. Fue un premio para todo el equipo por que este es un deporte colectivo. Y eso implica una gran responsabilidad ,por que ahora hay que demostrar que ha sido justo, con nuestra puesta en escena en los play-off.

¿Qué diferencias a nivel organizativo y de ética de trabajo hay entre el basket alemán y la ACB?

Tiene cosas muy buenas como el apoyo de las aficiones a sus equipos ganen o pierdan. La mayoría de pistas, aunque no sean algunas tan grandes, se llenan. Y hay un sentido del respeto y una disciplina muy grande con respecto a los rivales y a los árbitros. Hablando de baloncesto diría que es más físico y menos talentoso a nivel colectivo. Y nosotros en nuestro equipo intentamos que no sea así. Las plantillas están configuradas por seis americanos -que suelen ser bajitos y muy fuertes- y seis nacionales. Y esta estructura ha configurado el perfil del baloncesto alemán.

Presente y pasado

¿Por qué tras más de cuatro décadas en los banquillos en España decidió abandonar a los 70 años la, digamos, zona de confort de la ACB, liarse la manta a la cabeza e irse a entrenar al extranjero?

A mí me gustan proyectos como el del Alba que aunque no tenga un presupuesto muy alto sí tiene solidez. Además aquí hay la ambición de ir hacia arriba.

De 1993 al 2000, cuando usted dirigía al Barça, Svetislav Pesic entrenó al Alba. Ahora está usted en el banquillo berlinés y Pesic ha vuelto al Barça. Curiosidades de la vida...

Aquellos tiempos del Alba de Pesic queremos volver a rememorarlos. Y el objetivo es volver a ser competitivos. Lo de Pesic ahora me parece muy bien. Sigo los resultados y vi partidos de Euroliga. Ha conseguido dar un impulso y me alegro por él y por el Barça.

¿Desde la lejanía cómo se explica la inestabilidad del equipo y el banquillo del Barça en los últimos años usted que vivió una etapa tan longeva?

En mi etapa había un núcleo de jugadores de la casa que se mantenía como Epi, Sibilio, Solozábal, etc. complementado por fichajes. Luego llegaron Pau y Marc Gasol, Navarro... En definitiva, jugadores que mantenían el testigo. Últimamente no ha sucedido esto. Es difícil que un grupo se asiente con tantos cambios. Lo mejor es intentar tener jugadores de la casa y alrededor de ellos incorporar a otros.

Desde su larga etapa en el Palau hasta hoy ¿en qué cree que ha cambiado la filosofía del club con respecto al basket y a las secciones?

En mi época había una carácterística. Un presidente como Núñez que se interesaba mucho por el basket y un directivo como Alemany que estaba implicado con el equipo.Luego no sé en qué manera si los cambios que ha habido con los años han influido en la sección  porque no he estado en el club. 

¿Se ha planteado volver algún día al Barça como técnico o para integrarse en la estructura del club?

Mi norma siempre es: nunca me planteo especulaciones y más cuando trabajas para un club y estás a gusto. Si me lo llegaran a plantear pues me lo pensaría. Pero no me gusta pensar en algo que no ha sucedido y no sé si sucederá.

Desde la experiencia que le dan todos estos años de carrera ¿hacia dónde va en general el baloncesto con el pulso entre la Euroliga y la FIBA o las ventanas de selecciones? 

Pues hacia una guerra continua. La evidencia es que todos los estamentos miran hacia sus propios intereses. La Euroliga vela por los suyos y no le importan las ligas nacionales; la FIBA implantando ventanas de selecciones y la ACB intentando encontrar su espacio. Deberían haber acuerdos globales. Por ejemplo. Lo de las ventanas FIBA. Es como si, por ejemplo, durante unos Juegos Olímpicos, los jugadores se fueran con sus equipos a jugar la Copa y luego volvieran para seguir con la competición. No tiene ni pies ni cabeza. Los torneos de selecciones tienen cada día más equipos. Las ligas tienen un número de equipos desorbitado teniendo en cuenta el calendario. Y así podríamos seguir. Sería muy bueno que todos cedieran para organizar mejor las cosas.

Y encima ese ‘monstruo’ que lo devora todo llamado NBA...

Hay una competencia. La NBA se come el mundo del basket. Se lleva jugadores, incluso promesas que luego a lo mejor  ni les sirven pero allí les pagan mucho más. Y todo eso destroza el baloncesto europeo. Además, las ligas de desarrollo están adquiriendo mayor importancia. Todo eso son circunstancias que dificultan el desarrollo del baloncesto europeo.

Ahora tiene 71 años. ¿Ha pasado por su mente el poner fecha de caducidad a su carrera o no se lo ha planteado aún?

Yo me marco dos premisas para realizar mi profesión: tener salud y motivación para poder desarrollarla. Y, de momento y por suerte, las dos cosas las voy teniendo. Por tanto no me planteo ningún final. De momento vivo el presente que es mi club de Berlín.

Cumple 45 años de su debut en la élite

En 1973, Aíto García Reneses inició su trayectoria como entrenador en los banquillos de la élite. Su primera etapa transcurrió en el Círcol Catòlic de Badalona (1973-83). De allí dio el salto al Joventut (1983-85) paso previo a su fichaje por el Barça en 1985. Aíto dirgió al conjunto azulgrana en tres etapas hasta 2002, incluyendo dos campañas (1990-92) en que desempeñó el cargo de general manager y otra (1997-98) en la que se tomó un descanso.

En 2003 retornó al Joventut de Badalona (2003-08). Tras dirigir a la selección española en los Juegos de Pekín 2008 (plata) se incorporó al Unicaja, donde dirigiría al equipo hasta 2011. Su siguiente etapa fue en el entonces Cajasol Sevilla, en el que entrenaría de 2012 a 2014. Luego dirigiría al Gran Canaria y, tras tomarse un año sabático, el pasado verano firmó con el Alba Berlín hasta 2019.