Ferrari, la escudería que devora a sus directores deportivos

Mattia Binotto es el último de una larga lista de directores deportivos que llegaron a Ferrari y salieron despedidos.

Ferrari, la escudería que devora a sus directores deportivos

Ferrari, la escudería que devora a sus directores deportivos / SPORT

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En la Fórmula 1, los cambios no ocurren de la noche a la mañana. Aunque te llames Ferrari y tengas la historia más ilustre dentro del automovilismo, la paciencia no está siendo la mayor de las virtudes en la escudería de Maranello en los últimos años. El fichaje de Frederic Vasseur representa el último ejemplo de lo que hablamos.

El dirigente francés será el quinto director general en década y media en Ferrari. Si comparamos que el anterior director general de la Scuderia, Jean Todt, duró de 1993 a 2008 encontramos quizá los motivos claros de porqué no se consigue un título para el equipo rojo desde que Kimi Raikkonen alcanzara en 2007.

Las comparaciones son odiosas para Ferrari con sus rivales y para muestra un botón. Christian Horner lleva dirigiendo Red Bull desde 2005, mientras que Totto Wolff ha hecho lo propio con Mercedes desde 2014. Ferrari, mientras tanto, no ha parado de cambiar de cromos.

En el pasado, Ferrari fue un ejemplo de paciencia y buen hacer con un Todt -actual presidente de la Federación Internacional de Automovilismo- que se tiró sus siete primeros años sin ganar en el equipo italiano y eso que tenía a su lado a Michael Schumacher. En aquel momento, el equipo italiano supo sembrar para luego recoger cinco títulos consecutivos de la mano del alemán.

Su racha se vio interrumpida por un bicampeonato de Fernando Alonso, aunque se tomaron su cumplida venganza con Kimi Raikkonen al año siguiente en lo que fue el último título de la Scuderia. Todt decidió colgar auriculares y entregó el testigo a Stefano Domenicali -actual CEO de la Fórmula 1- con quien el equipo estuvo a punto de ganar en dos ocasiones.

La maldición de Alonso empezó en Ferrari

El CEO de Ferrari se lanzó a fichar a un Fernando Alonso que se quedó a las puertas de su tercer Mundial tanto en 2010 como en 2012. El asturiano siempre achacó que la estrategia de su equipo en los momentos determinantes no fue la mejor señalando a un Domenicali que terminó por salir en 2013 ante el enfrentamiento entre estrella y dirigente.

Alonso, sin embargo, comprobó que las cosas pueden ir a peor y más en Ferrari. Para 2014 ficharon a un tipo con pinta de play-boy llamado Marco Mattiacci que apenas duró esa misma temporada. El sucesor de Domenicali -que venía de Estados Unidos- ni se había enterado de que la Fórmula 1 había entrado en la era híbrida.

Con Ferrari hecha un caos, el asturiano se marchó a McLaren en una de las peores decisiones de su carrera, mientras que Ferrari daba otro giro de 180 grados contratando para el puesto de jefe a Maurizio Arrivabene con Sebastian Vettel -el verdugo del equipo en la época Alonso- como fichaje estrella.

Los italianos estuvieron cerca en un par de ocasiones de inquietar a Lewis Hamilton con un Vettel que siempre carecía de la herramientas necesarias para doblegar al Mercedes. También hay que resaltar que los italianos siempre empezaban fuertes las temporadas, pero eran incapaces de desarrollarlo al máximo nivel en el transcurso del año.

Una decepción detrás de otra

Así las cosas, Arrivabene cumplió un ciclo de tres temporadas sin conseguir el título dando el testigo a Mattia Binotto para 2019. El italiano tomó la decisión de rejuvenecer al equipo apostando por un chaval de 21 años llamado Charles Leclerc como su nueva estrella emergente echando al último campeón Kimi Raikkonen.

Pese a que el monegasco le dio la razón batiendo a Vettel en velocidad y apuntando maneras de campeón, no es menos cierto que la fábrica no consiguió cumplir con las expectativas de acercarse al dominio de los Mercedes como sí hizo Red Bull. Ferrari dio un voto de confianza a Binotto pensando que en 2022 con la nueva normativa tendrían oportunidades.

Tras dominar las cuatro primeras carreras de la temporada con mano de hierro, Ferrari entró en una crisis de la que han sido incapaces de salir en todo el año para desesperación tanto de Leclerc como de Carlos Sainz. Ambos han visto cómo el equipo no ha estado a la altura terminando por ser culpado un Binotto que ha sido un meme.

Ahora le llega el turno a un Frederic Vasseur que ya viene marcado como hombre 100% de Leclerc. Le hizo debutar en la Fórmula 1 con un Sauber en 2018 y el monegasco no ha parado de elogiarle desde entonces. Además, el dirigente francés ha sido socio del hijo de Jean Todt por lo que todo queda en casa en Ferrari en busca de la corona que lleva resistiéndoseles ya 15 temporadas.