Rubiales, al borde de la dimisión

El presidente de la RFEF presentará este viernes su dimisión al comprobar la falta de apoyos para salir airoso en la Asamblea Extraordinaria

El comunicado de Jenni Hermoso por el beso no consentido, las manifestaciones desde el Gobierno y el expediente abierto por la FIFA le han dejado contra las cuerdas

Rubiales pide perdón tras el 'polémico' beso a Jenni Hermoso: "Seguramente me he equivocado..."

El Presidente de la Federación ha querido pedir disculpas tras protagonizar uno de los momentos más inesperados en plena celebración mundialista, en el que besó los labios de Jenni Hermoso. Estas han sido sus explicaciones / RFEF

German Bona

German Bona

La Asamblea General Extraordinaria que se celebrará este viernes, a partir de las 12.00 horas, en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas apunta a ser el escenario en el que Luis Rubiales presentará la dimisión como presidente de la RFEF.

El actual presidente llegaba muy tocado y contra las cuerdas por el alud de reacciones de condena que se han desencadenado a raíz del beso no consentido a la futbolista Jennifer Hermoso tras la conquista del Mundial, además de otras actitudes, como tocarse los genitales en el palco del estadio de la final a modo de celebración.

Incluso cabe la posibilidad de que no se lleva a cabo esta Asamblea por falta de quórum, lo que precipitaría aún más la decisión. Los presidentes de las Federaciones Territoriales tienen un gran peso en la RFEF y su toma de decisiones, y para Luis Rubiales tener su apoyo era fundamental con tal de mantenerse en el cargo, pero ha ido perdiendo apoyos hasta el punto de que algunos de estos dirigentes no acudirán a la Asamblea -la Federación Vasca ya lo ha anunciado- y otros, directamentele darían la espalda y no le secundarían.

Tres han sido los desencadenantes de la decisión final: el comunicado de Jennifer Hermoso pidiendo medidas ejemplares contra Rubiales, las diras manifestaciones desde el Gobierno por su comportamiento y el procedimiento disciplinario abierto por la FIFA.

El Ejecutivo, a través del Consejo Superior de Deportes, tiene la potestad de elevar al Tribunal Deportivo de Arbitraje (TAD) las denuncias que tiene sobre la mesa, pero podría incluso no ser necesario si Luis Rubiales, como cada vez parece más evidente, da un paso al lado y presenta la dimisión.