Leo Messi meditará si juega ante el Betis

Ivan San Antonio

Ivan San Antonio

Que Leo Messi no jugara en Milán no significa que no quisiera hacerlo. La prueba es que viajó y no fue hasta el último momento cuando tomó la decisión de que lo más adecuado era no correr ningún riesgo. Así lo prefería el cuerpo técnico y así lo aconsejaban los servicios médicos, pero cuando se trata de Messi la última palabra la suele tener él, que es quien mejor se conoce. Leo, tras escuchar a su entorno más cercano, acabó considerando como mejor opción descansar ante el Inter.

El próximo domingo 11 de noviembre habrán pasado tres semanas y un día desde que sufrió la fractura del radio del brazo derecho ante el Sevilla, el pasado 30 de octubre. El parte médico oficial emitido por el Barça hablabla, precisamente, de un periodo de tres semanas para que el '10' pudiera volver al equipo. Sin embargo, el calendario ha querido que la visita del Betis al Camp Nou del domingo (16:15) se produzca justo antes de un parón de selecciones que durará trece días, los que separan el partido ante los sevillanos del desplazamiento a Madrid para jugar ante el Atlético. Ese partido está marcado en rojo y Messi no se lo perderá. 

Pero a día de hoy no existe ninguna certeza de que no se pierda el Barça-Betis. No existiría ninguna duda si el encuentro fuera de esos en los que está prohibido fallar, pero Leo ha llegado a un punto de madurez que le permite no dejarse llevar por el ímpetu de sus primeros años. Sigue sin querer perderse ni un solo minuto de competición (lo prueba que este miércoles haya acudido a la Ciutat Esportiva en solitario para entrenarse), pero también ha aprendido con los años a gestionarse con perspectiva. El riesgo cero seguirá siendo ley y Messi esperará hasta el último momento para valorar si reaparece y en qué medida. Pero no debería extrañar a nadie que el '10' se perdiera su sexto partido consecutivo tras la lesión en el brazo. Si entendió que jugar ante el Inter podía ser contraproducente, le costará algo menos comprender que, aunque sea mínimo, lo más inteligente sería no correr ningún tipo de riesgo y completar la recuperación al cien por cien.