Luis Suárez, enchufado

Luis Suárez ha vuelto por sus fueros. El delantero dio síntomas de agotamiento en el Coliseum de Getafe y era necesaria una pausa para volver con más fuerza. El jugador se dio cuenta que debía echar el pie a tierra algún día y así ocurrió ante el Eibar. Un descanso terapéutico que dio resultados inmediatos. En Girona se vio de nuevo al Suárez incisivo, peleón y, sobre todo, reconciliado con el gol.

El jugador vuelve a sentirse a tope físicamente. Luis hizo un gran esfuerzo para recortar plazos en la recuperación después del fuerte golpe sufrido en la rodilla derecha en el partido de vuelta de la final de la Supercopa de España en el Bernabéu. El futbolista llegó a tiempo para ayudar a su selección en los vitales encuentros ante Argentina y Paraguay en los que Uruguay sacó cuatro puntos que la dejan a un paso del Mundail de Rusia.

Parón necesario

Tras un largo viaje y solo un día de entrenamiento se puso a disposición de Ernesto Valverde para jugar el derbi ante el Espanyol en le que se estrenó como goleador esta temporada y disputó también los 90 minutos de forma consecutiva frente a la Juventus y el Getafe. Dos partidos en los que acusó el desgaste, sobre el del Colisuem. El propio jugador fue quien se dio cuenta de que debía realizar una pausa y el descanso ante el Eibar le vino de perlasAsí lo confirmó a SPORT justo antes de realizar el reportaje con motivo de los 100 encuentros en Liga que cumplió en Montilivi.

Suárez pisó el campo 9 de la Ciutat Esportiva después de la primera sesión de trabajo de la semana, con las vistas puestas en el partido de mañana en Lisboa ante el Sporting en la Champions League. El jugador llegó sonriente y relajado. Para un delantero centro no hay nada mejor que el gol para que el estado de ánimo sea óptimo. En Girona volvió a pisar fuerte, incordiar y generar peligro para sus compañeros. El trabajo se tradujo en la incidencia directa en dos de los tres goles. En uno molestó lo justo para que Gorka se introdujera el balón en su propia puerta y en el segundo definió con su clase habitual.

Marca demoledora

Un gol que significó su tanto 87 en los 100 encuentros ligueros que ha disputado con el FC Barcelona. Una cifra solo al alcance de un auténtico depredador del área, cuya ambición nunca se agota. Luis Suárez ya es centenario con la camiseta azulgrana y espera engrosar aún más las cifras en un año especial con el Mundial de Rusia como colofón.