Luis Enrique, desolado después de la lesión de Aleix Vidal

Javier Cuadros

La lesión de Aleix Vidal ante el Alavés podría mantener al lateral catalán del Barça <strong>muchos meses alejado de los terrenos de juego</strong>. A falta de parte médico oficial, la reacción de sus compañeros en el momento de la entrada, así como las palabras de Robert Fernández después del encuentro, donde ha confesado que se teme lo peor, son pistas suficientes para adivinar que se trata de una lesión seria.

La imagen del jugador hizo saltar la alarma entre sus compañeros

Después de segada de Theo Hernández, Aleix Vidal quedó tendido en el césped de Mendizorroza, siendo Rakitic el primero en acercarse a comprobar el estado del futbolista. El croata llamó inmediatamente a los servicios médicos del club. También lo hizo Iniesta, que pidió la camilla al banquillo blaugrana tan pronto vio el tobillo de Vidal.

La reacción del cuerpo técnico tampoco se hizo esperar: Juan Carlos Unzué salió inmediatamente a interesarse por el lateral culé, y Luis Enrique permaneció en su banquillo, con la mirada perdida y semblante de preocupación.

La lesión viene justo cuando Luis Enrique empezaba a confiar plenamente en el jugador

La lesión de Aleix Vidal puede ser también una cuestión que toca en lo personal al técnico asturiano del Barça. Hay que tener en cuenta que desde que llegó al club blaugrana, Luis Enrique no ha contado con Vidal en muchos encuentros, en los que ni siquiera fue convocado. Parecía en las últimas semanas que el buen rendimiento del lateral en las oportunidades que le había brindado últimamente ‘Lucho’ había hecho cambiar de opinión al entrenador culé.

Luis Enrique declaró en rueda de prensa, de hecho, que estaba <strong>muy satisfecho con el rendimiento del jugador</strong>, que había salido como titular frente al Alavés.

Quedamos a la espera de saber el alcance de la lesión de Vidal. Por el momento no se descarta una luxación o incluso una fractura.