Hace unos días os compartíamos una interesante (no porque la hayamos hecho nosotros, sino porque el personaje en si lo es) entrevista con el traumatólogo especialista deportivo Juanjo López en la que nos desgranaba un informe llevado a cabo durante este confinamiento en el que saca conclusiones sobre el incremento de ciertas lesiones producidas por un cambio de rutina de nuestra actividad física y, en muchos casos, un aumento descontrolado de ella. El ‘síndrome del pasillo’, producido por un sobreexceso de ejercicio dentro de casa, por muchos giros al correr en espacios cortos, y una afectación en las rodillas y meniscos que ha desembocado en lesiones, en algunos casos graves y que han necesitado intervención quirúrgica urgente.
Una vuelta muy progresiva
Pues bien, una vez se ha anunciado que muy probablemente en una semana podremos estar corriendo y haciendo actividad al aire libre de nuevo, ahondamos con el propio Doctor Juanjo López cómo debe producirse esa vuelta a la actividad (resaltar que es traumatólogo y no preparador físico y nos habla más de posibles afectaciones y prevención de lesiones típicas después de largos periodos de inactividad o de dejar de hacer algo que solíamos y volver de golpe tras un tiempo considerable). “Lo ideal sería hacer una buena prevención y ahí está la figura del preparador físico para que, en función de lo que hayamos hecho estas semanas, nos prepare un correcto ritmo de vuelta”.
Cosas a tener en cuenta
“Es importante distinguir entre el deportista profesional, que habrá hecho un trabajo importante en casa, muchos con cintas y bicicletas, ejercicios de elasticidad, de fuerza controlada, y esa gente está más controlada; después está el deportista amateur, que algunos habrán hecho cosas y otros, nada“, matiza López, quien añade que “la vuelta al deporte debe ser progresiva, si antes hacíamos 10 kilómetros en cada salida no podemos hacer ahora 45 días después otra vez 10 kilómetros; es como volver a hacer una pretemporada y en las pretemporadas suelen surgir lesiones por sobrecarga casi siempre o por una alteración biomecánica; se pueden esperar fascitis plantares, lesiones musculares sobre todo a nivel de gemelos o sóleo y después también habrá problemas biomecánicos como el síndrome de la cintilla iliotibial o rodilla del corredor o la periostitis tibial, que es también por una sobrecarga de la tibia”.
Ser muy consciente
“En resumen, ponerte en manos de profesionales y y realizar una vuelta al deporte muy paulatina en función de cada corredor; si eres un corredor muy habitual y te has mantenido en forma, tu vuelta puede ser más rápida, pero si no has hecho nada o has ganado mucho peso tendrás antes que controlar el peso, cuidarte, andar, hacer algo más suave antes de ponerte las zapatillas y hacer kilómetros”, sentencia el Juanjo López.
