La derrota en el Coliseum Alfonso Pérez ante al Getafe junto la penosa imagen que transmitió el Espanyol hasta la expulsión de Flamini ha aumentado la decepción/desilusión, pero también la preocupación. La afición ya muestra abiertamente su malestar (se ha iniciado una campaña en las redes convocando a no acudir mañana al estadio); mientras en el club se ha fijado una prioridad absoluta: asegurar matemáticamente la permanencia lo antes posible.

El Espanyol no cesará a Quique tras el 1-0 de Getafe (leer noticia)