Esta es la razón por la que se apagan las luces de la cabina del avión durante el despegue y aterrizaje

Una práctica común en aviación y relacionada con la seguridad y visibilidad

Un avión despegando.

Un avión despegando. / Pixabay

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En el primer cuatrimestre de 2024 se gestionaron más de 670,000 vuelos en España, según datos de Enaire, y solo en abril, llegaron casi nueve millones de viajeros por vía aérea.

El avión es uno de los medios de transporte más utilizados debido a su rapidez y seguridad. A bordo, las azafatas siempre explican las normas de seguridad básicas, y durante despegues y aterrizajes, se apagan las luces de cabina por razones específicas.

Este procedimiento es crucial, ya que estos momentos del vuelo son estadísticamente los más propensos a incidentes. Apagar las luces permite a los pasajeros y a la tripulación adaptarse mejor a la oscuridad, lo que facilita una evacuación más rápida y segura en caso de emergencia.

Además, reduce los reflejos en las ventanas, mejorando la visibilidad exterior para la tripulación, lo cual es vital para identificar situaciones anormales o peligrosas.

Este protocolo es un estándar global en la aviación y tiene también un efecto psicológico, preparando a los pasajeros para cualquier eventualidad. En vuelos diurnos, aunque las luces no se apagan, se pide a los pasajeros que mantengan las ventanillas levantadas para evitar deslumbramientos durante una posible evacuación.

Ahora ya sabes cuál es la razón por la que los aviones apagan las luces de la cabina en dos momentos tan cruciales como el despegue y el aterrizaje. Como has comprobado, no es una cuestión a la que temer, ya que se trata de una medida de seguridad que convierte volar en un medio de transporte seguro.