Lío monumental con las entradas del España-Italia

Las localidades que se pusieron a la venta se agotaron en minutos y muchísimos aficionados no pudieron comprarlas

De las 10.980 disponibles, muchas las distribuyó la Federación Galega de Fútbol y la RFEF con sus patrocinadores

La selección femenina jugará en Pontevedra ante Italia

La selección femenina jugará en Pontevedra ante Italia / RFEF

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La selección española femenina de fútbol recibe en Pontevedra a Italia en partido correspondiente a la quinta jornada de la Women's Nations League el próximo 1 de diciembre. La expectación por este encuentro, que se disputará en el estadio Pasarón, con capacidad para 10.980 espectadores, ha sido máxima, pero muy pocos aficionados han logrado una entrada. De hecho, hay lío.

Lo explicaba 'Carrusel Deportivo' a través de 'X'. La información explica que, a los pocos minutos de ponerse a la venta, las localidades se agotaron. De hecho, la RFEF anunciaba en la misma red social a las 11:00 que, una hora después, se pondrían a la venta.

Sin embargo, fueron muchas las respuestas de aficionados y aficionadas que se quejaban de que había sido imposible comprar una entrada y que, cada vez que lo intentaban, aparecía el mensaje de que se habían agotado o no estaban disponibles para la zona en cuestión del estadio. La RFEF anunció el 'sold out' al cabo de una hora y media.

Las respuestas no se hicieron esperar. Fueron muchos los que sospechaban que se había puesto a la venta un número ínfimo de entradas para el público general. De hecho, el propio presidente de la Federación Galega de Fútbol, Rafael Louzán, explicaba este jueves que el partido servía de homenaje a la campeona del mundo, la gallega Tere Abelleira, pero también para el fútbol femenino gallego y sus clubs, para quienes se habían repartido un número importante de entradas. Junto a los compromisos con los patrocinadores de la RFEF y de la selección femenina de fútbol, fueron muchísimos aficionados los que se quedaron sin entrada. Las quejas no se hicieron esperar.

El lleno, en principio, está garantizado.