La 'era Jordi Roger' llega a su fin en el Cornellà

"Lo he dado todo en el Cornellà y necesito aire fresco”. Con lágrimas en los ojos y acompañado por la plana mayor de la entidad, sus jugadores y su familia, Jordi Roger anunció su adiós al club en el que se consagró como entrenador. Todo apunta a que su próximo destino será la Balompédica Linense, si bien el técnico no lo confirmó.

La sala de prensa Jordi Alba del Municipal de Cornellà se quedó literalmente pequeña mientras un emocionado Roger, flanqueado por el director deportivo del club, Andrés Manzano, y su presidente, Álex Talavera, desgranaba los motivos de su decisión: “Estoy fundido. Me he desgastado. Nunca me había planteado una despedida. Después del play-off contra el Sporting B, mi cabeza empezó a dar vueltas y si no estoy al 100 por 100, no me veo capacitado”.

Tanto Manzano como Talavera dedicaron palabras de elogio a un técnico en el que confiaron desde que hizo grande al Juvenil A y al primer equipo, al que llevó a Segunda B en 2014, con el colofón de la Copa Catalunya conquistada en Gavà el pasado sábado. "Lideraste la parte deportiva cuando el club no pasaba su mejor momento", le recordó el director deportivo.  

“El club y yo hemos crecido de la mano”, añadió Roger. Aquel futbolista formado en el Fundació Martorell y la Damm y luego recorrió medio fútbol catalán, como delantero de equipos como el Peralada, el Palamós, el Europa, el Castelldefels, el Vilassar o el Barceloneta -donde se retiró- , llegó a 'su' Cornellà en el 2008 y vivió el pasó de la Vía Férrea al flamante Municipal de la calle Sorral del Riu. Diez años de una era que ahora llega a su fin y que en Cornellà nadie podrá olvidar.