La rajada de Jesé contra sus excompañeros del Madrid

Jesé Rodríguez ha criticado duramente al Real Madrid y a algunos de sus compañeros por el trato que le han dispensado en una entrevista concedida al Diario AS.

"Echo mucho de menos jugar al fútbol. Quiero volver a jugar cuanto antes. Me paso los días esperando a que el mercado de fichajes vuelva a abrirse. Me encuentro bien y me estoy preparando muchísimo", asegura en primera instancia un Jesé que no tiene ficha en el equipo parisino.

El delantero apenas se acuerda de cuando jugó por última vez y señala que no jugar es "durísimo. Lo he pasado mal, pero intento sacar cosas positivas de lo negativo. Ha sido una preparación psicológica para mí, de valorar qué es lo que realmente necesito en mi vida y en el fútbol. Me he rodeado de gente a la que quiero de verdad. También he cambiado hábitos en mi vida. Cambié amistades, me acerqué a mi familia. Creo que tenía unas amistades que no eran buenas y las quité de mi vida. Además de entrenar con el equipo, todos los días hago un entrenamiento personal con él y también otro en casa. He bajado siete kilos."

Además de una estricta dieta que le ha devuelto "al peso que tenía antes de la lesión de rodilla y que nunca tuve después", Jesé reflexiona sobre haber  "aprendido con el tiempo y a base de cosas malas. Ahora sé distinguir mucho mejor cuál es la realidad y a tener los pies en el suelo. No quiere decir que antes no los tuviera, pero ahora soy mucho más maduro. Crees que tienes amistades verdaderas y que dan todo por ti y luego a la hora de la verdad no te corrigen cuando estás haciendo las cosas mal. Al final los únicos que no te van a fallar son tus familiares. Yo me senté con ellos y les dije que quería cambiar cosas. Hice clic".

Jesé se arrepiente de "no haber aprovechado los momentos que tuve en el Madrid después de la lesión. Yo pienso: si entonces hubiera trabajado como llevo haciéndolo estos últimos tres meses… Luego ya vine a París, tuve la apendicitis, estuve dos meses parado y nunca jugué con regularidad. Si hubiera sido tan estricto conmigo mismo después de la lesión en el Madrid, a lo mejor hubieran pasado otras cosas".

Tiene muy claro su error. "Quieres comerte el mundo pero el problema llega cuando te acomodas. Eso fue lo que me pasó: me acomodé. A ese nivel no puedes acomodarte nunca. Había llegado al Madrid, con 16 años marqué con el primer equipo, me pusieron un contrato delante, lo había hecho todo bien hasta la lesión. Cuando volví, como que me conformé".

No guarda buen recuerdo de sus excompañeros madridistas.  "Ahí te das cuenta de muchas cosas. Pero no es una crítica, de verdad, cada uno hace lo que quiere. Yo pensé que tenía amigos en el vestuario del Madrid y han dejado de serlo porque tampoco se han preocupado o han contestado a mis mensajes. En Madrid vivía rodeado de gente, pero me sentía solo. Sí he tenido dos amigos, con los que jugaba desde pequeño, que han estado ahí siempre. Uno juega en Primera y el otro en categorías más bajas"

Sobre la grave enfermedad de su hijo, confesó que "lo he pasado muy mal y lo sigo pasando mal. No le deseo a nadie que su hijo tenga una enfermedad y además incurable como es mi caso. Pero también me motiva. Cuando estoy cansado entrenando, pienso: “No puedo sentir dolor ni cansancio, debo hacerlo por mi hijo”. Por él y por los otros dos que tengo".