El 'niño' de Luis Enrique

Warren Zaïre-Emery es un 'niño' que juega contra hombres. El futbolista de 17 años, llamado a ser el relevo de Marco Verratti en el PSG, es la gran apuesta de Luis Enrique en el cuadro francés y uno de los nombres llamados a liderar el proyecto que viene en París.

El dardo de Messi al PSG

La salida de Marco Verratti rumbo a Qatar le ha abierto definitivamente la puerta para ser una pieza clave de uno de los equipos más mediaticos del planeta. Al mediocentro francés, que combina los entrenamientos por la mañana con las obligaciones escolares por la tarde, no siente la presión de poder lucir el '6' que vestía el italiano en un futuro: “Si calculo 3 + 3, son 6, ¿verdad?", bromeaba. Tampoco le impresiona ser el jugador más joven de la historia en ser titular en un partido de fase final de la Champions League (16 años y 343 días) ante todo un Bayern de Múnich.

Es esta personalidad, acompañada del talento que presenta, evidentemente, lo que ha encandilado a Luis Enrique. Conocedor de todo el potencial que tiene, mezclando potencia física con buen pie, le da muchos minutos y trata de rodearlo lo mejor posible en la medular para que siga progresando.

LO JUEGA TODO

El joven, que ya deslumbró a Christophe Galtier la temporada pasada, lo está jugando prácticamente todo en este arranque de curso. Es un diamante en bruto que todos tratan de sacarle el máximo brillo posible. "Nadie conoce todavía al verdadero Warren”, advierte uno de los habituales de la base del PSG sobre el nivel que puede llegar a alcanzar.

El asturiano se está implicando para que explote del todo y le está recompensando con minutos, también en Champions League. Seis partidos, seis titularidades en las que ha sumado 530 minutos de 540 posibles. Solo ha sido sustituido en dos choques, ambos en el minuto 85, dejando clara su intención con él.

LOS CONSEJOS DE LUIS ENRIQUE

El técnico español, según explica 'Le Parisien', le pide que sea el dinamizador del juego. Atreverse a mirar más hacia adelante y aprovechar su gran zancada y explosividad para romper líneas de presión por si solo. También considera clave la capacidad que desarrolle para conectar con Achraf Hakimi y potenciar sus incursiones por la banda derecha, uno de los argumentos más importantes del PSG en ataque.

Llegó al PSG con ocho años y es uno de los ídolos de la afición. En un vestuario plagado de estrellas, pero que no tienen ninguno vinculo emocional, se necesitan jugadores de este perfil, con amor por los colores. Hace unos años miraba a sus ídolos desde la grada del Parque de los Príncipes. Ahora juega al fútbol con ellos, al más alto nivel.

Zaïre-Emery lo tiene todo para ser importante en el PSG que viene. Talento, aptitudes físicas, el cariño de la afición y la confianza de su entrenador. Aún tiene mucho trabajo por delante, pues no es más que un 'chaval' nacido en el 2006. Sin embargo, todo lo que presenta da pie a pensar en cosas grandes.