Solskjaer vuelve a los orígenes

El Manchester United sigue contando sus partidos por victorias tras el despido de José Mourinho. La última llegó este sábado en la tercera ronda de la FA Cup, ante un Reading inferior que los diablos rojos superaron (2-0) con su segunda unidad en el campo. Mata de penalti y Lukaku solucionaron la papeleta e hicieron que en Manchester todo parezca más bonito con Ole Gunnar Solskjaer en el banquillo.

La entidad de los cinco rivales a los que se ha enfrentado el noruego desde su regreso a Old Trafford no es la mayor, pero el cambio que ha experimentado el equipo y la grada del mítico estadio es muy sensible.

Sobre el verde, los números hablan por si solos: 16 goles en cinco partidos, solo tres tantos encajados y la consolidación en el equipo de nombres importantes. El primero es claramente el de Paul Pogba. El francés, descansado tras la marcha de Mourinho, vuelve a creer en el proyecto.

“Ahora queremos atacar. Lo queremos los jugadores, lo quiere la afición y lo quiere el entrenador”, declaró el centrocampista tras la victoria del equipo ante el Bournemouth. Solskjaer lo ha liberado de tareas defensivas, protegido por Matic y Ander Herrera, y con más llegada que nunca ha registrado sus mejores cifras: en los últimos cuatro partidos que ha jugado, registra 4 goles y 3 asistencias.

El otro gran beneficiado ha sido Marcus Rashford. Solskjaer lo ha ubicado como referencia en ataque, con libertad para caer a banda e intercambiar posiciones con el resto de atacantes, normalmente Martial, Lingard o Mata. El mayor dinamismo se ha traducido en más goles, y en los fans encantados de ver al joven talento mancuniano brillando con el club de su vida. 3 goles y una asistencia son sus registros con Solskjaer en el club.

Regreso a los valores del United

La gran aceptación del técnico interino por los fans del United se debe a un motivo principal: ha significado un retorno a la esencia del club, a la filosofía instaurada por Sir Alex Ferguson.

Para conseguir esto se ha apoyado en Mike Phelan. El histórico asistente de Ferguson ha vuelto al banquillo para acompañar al noruego, antiguo pupilo, en su periplo. También sigue Michael Carrick en el staff. Los tres forman forman un grupo de trabajo claramente influenciado por Sir Alex.

Solskjaer sabe manejarse también en la sala de prensa. Ha convencido a la opinión pública con un discurso lleno de referencias al espíritu del club, insistente en que el objetivo debe ser atacar y dejarlo todo sobre el campo, recordando la historia de la entidad.

A menudo apela a resultados históricos del United en sus discursos, y no esconde que mantiene contacto casi diario con ‘Fergie’. El escocés tiene las puertas de Carrington más abiertas que nunca, a diferencia del hermetismo que prefería Mourinho en el campo de entrenamiento.

¿Se puede quedar el año que viene?

Tampoco ha dudado en abrir el camino a los jóvenes. En cinco partidos, ha dado minutos a dos canteranos: Angel Gomes y Tahith Chong, este último haciendo su debut oficial. Ahora viendo los resultados, y los cambios que ha aportado ‘Ole’, muchos se preguntan si podría continuar más allá de esta temporada.

Ahora mismo se hace muy difícil pensar que así sea. Se tendrá que ver la reacción del equipo si llega algún tropiezo, y si es capaz de dar respuestas tácticas más allá de apelar al ADN del United. Todo apunta a que el club no le dará ningún fichaje en enero, algo que refuerza que su paso por el club sea más un revitalizador que un plan a largo plazo.

Al nórdico le da igual, lo acepta todo y se centra en hacer de su etapa un recordatorio de los orígenes del club que deberá tener muy presente el próximo manager. En todas las quinielas sigue Mauricio Pochettino como el gran deseado para la plaza. Antes de saber si esto llegará a producirse, el efecto Solskjaer hace que nadie en Inglaterra pueda cuestionar la decisión de haber prescindido de Jose Mourinho.