Rooney se acerca al Everton

Todos los caminos de Rooney llevan a Goodison Park. O eso parece. El delantero inglés, que abandonó el Everton en el verano de 2004 por un traspaso record que no se superó hasta el de John Stones al Manchester City, está cerca de concretar su regreso al club de su niñez.

Rooney, de 31 años, entiende que ha perdido su batalla con un José Mourinho que a través de un discurso muy respetuoso pero unos hechos aún más concluyentes le ha dejado claro que no cuenta con él y que desea su salida. Ya le habría gustado al entrenador portugués que fuera durante el mercado de invierno, que en China se prolongó hasta el 28 de febrero, pero el jugador descartó tal posibilidad.

Después de desestimar un acercamiento en el verano de 2016, el representante de Rooney viajó hasta China en diciembre, citado por el Guanghzou Evergrande. El campeón de la Super Liga, que buscaba desembarazarse de Jackson Martínez le puso sobre la mesa una oferta millonaria (se especuló con 574.000 euros a la semana)... Que el jugador rechazó.

Rooney aceptaría un salario mucho menor del que disfruta en el United

Con el Everton es distinto. Y más aún a la vista de sus números este curso en el Manchester United. Al jugador le seduce regresar al equipo en el que se dio a conocer y en Old Trafford se conocen bien sus intenciones. No es extraño después de que Rooney solo haya sido titular en 19 de los 48 partidos disputados por los diablos rojos y que su ostracismo empiece a ser sospechoso.

Argumentado oficialmente en diferentes molestias físicas, Mourinho no ha contado con Rooney en los cuatro últimos partidos del United, confirmando que no le dará mucho más protagonismo. El delantero,  titular en 7 de los primeros 8 partidos de la temporada, solo lo ha sido en 12 de los siguientes 40 y, convencido de la necesidad de marcharse, tiene en Liverpool su destino soñado.

"Aunque hace años que se marchó sigue muy unido a sus raices. Mantiene amigos de su niñez y siempre ha sido muy respetado desde el Everton" confirmó una fuente cercana al club de Goodison Park, donde Ronald Koeman, en primera persona, le abrió las puertas a su regreso.

El Everton, que teme perder a un Lukaku cuyo destino podría ser, precisamente, Old Trafford, no pagaría ningún traspaso por Rooney, que de acuerdo a lo publicado por The Independent recibiría la carta de libertad por parte del Manchester United... A condición de que el jugador renunciara a exigir el salario que hasta 2019 tiene acordado con los diablos rojos y que sería cercano a los 30 millones de euros.

En el seno del Everton no hay ni una voz discordante con su retorno

El mismo medio afirma que los toffees estarían en disposición de ofrecer a Rooney un salario semanal cercano a los 175.000 euros, muy por debajo del que disfruta actualmente pero que el jugador aceptaría por su deseo de volver a casa.

El delantero, que no ha sido citado por Gareth Southgate para formar parte de la selección inglesa en el doble duelo frente a Alemania y Lituania, tiene sobre la mesa más propuestas de la Premier League, una en firme del West Ham, y considera que está en condiciones de rendir en el torneo, por lo que rechazó el millonario ofrecimiento chino.

Y nada mejor, en su ánimo, que volver al club de su niñez, donde Koeman ansía su fichaje y en cuyo vestuario sería recibido con los brazos abiertos.