Phil Foden, el último superviviente de la cantera del City

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Foden celebra uno de sus goles / AFP

Pol Ballús

La exhibición de Phil Foden en el partido de FA Cup que disputó el City contra el Newport justifican la confianza que Guardiola tiene en el. El joven de 18 años marcó dos goles y ya lleva cinco esta temporada. El pasado diciembre, Foden renovó su contrato hasta 2024, haciendo algo poco habitual últimamente entre los mejores canteranos del City: quedarse en el club para triunfar. Sancho, Brahim o Matondo decidieron dejar Manchester para labrarse su camino en la élite. Foden es el último superviviente de una generación.

Hubo un momento en la historia de Phil que no era el primer nombre, ni el segundo, en la lista de grandes proyectos de la cantera del Manchester City. De hecho, a los 14 años era suplente en el equipo de su camada. Cambió su destino con la llegada, entre otros, de Rodolf Borrell a la cantera. Con “Rodo”, que ya había pasado por el fútbol formativo de Barça o Liverpool, se impuso un estilo de juego que permitió a Foden salir del ostracismo. Ahora Borrell forma parte del staff de Pep.

Con la llegada de Guardiola en el Manchester City, el joven mancuniano ya era una de las perlas del club. Aunque, para muchos, no la mejor. Brahim Díaz y, sobre todo, Jadon Sancho partían por delante suyo en las quinielas para definir la próxima estrella. Txiki Begiristain, que conoce a Pep como pocos, sabía que el que encandilaría al catalán sería el chaval delgado de Stockport. “Tenemos un niño en el sub-18 que es buenísimo, de verdad. Míralo un día”, le recomendó el vasco. El resto es historia.

El fútbol de Foden, como es sabido, encaja a la perfección con los ojos de Pep. Y tanto el de Santpedor como el club quisieron apostar por los tres diamantes en bruto de su cantera. Cosas del fútbol, la apuesta no se ha completado. El primero en impedirlo fue Sancho, que decidió hacer las maletas. El mayor talento individual que ha pasado por la cantera del City exigió a Guardiola, con 17 años, tener minutos de calidad en el primer equipo. Los ‘sky blue’ no pudieron dárselos, y ahora se alegran de ello en el Borussia Dortmund.

El segundo en irse fue Brahim Díaz, el pasado mercado de invierno. No quiso esperar más, y viendo que Foden le había pasado por delante en la lista de prioridades, optó por probar suerte en el Real Madrid, que pagó 15 millones de libras por su pase. El último jugador en sumarse a esa tendencia ha sido Rabbi Matondo: un extremo galés de 18 años. Destaca por su velocidad: en el City superó a Sané, Sterling o Walker como futbolista más rápido del club. Ha debutado con la selección absoluta galesa, pero no llegó a hacerlo con Guardiola. En enero llegó el Schalke con dinero e intención de llevárselo, y el City no opuso resistencia cuando se llegó a un buen precio: 11 millones de libras, opción de recompra de 30 y el 25% del importe de cualquier futuro traspaso.

Hay múltiples caminos para llegar a la élite del fútbol, todos ellos respetables. A día de hoy parece imposible decir, por ejemplo, que Jadon Sancho se equivocara fichando por el Dortmund. Pero que aquel chaval de Stockport que nació con la camiseta del City puesta, entró en la cantera del club de su vida a los siete años y que su gran sueño era pisar algún día el Etihad Stadium, esté brillando en el City, es una historia que reconcilia con un fútbol que, quizás, ya es de otra época.