¡Qué triste es ver a Messi tan lejos!

Es inevitable pensar en lo que hubiera pasado si Leo Messi hubiera estado ayer vestido de blanco en el campo del Villareal o hubiera iniciado la temporada con el Barcelona e hiciera lo que está haciendo en Estados Unidos. La afición se levanta desde hace semanas con un ojo pendiente en lo que pasa en Miami, el peor equipo de la MLS que todavía no ha perdido ni un partido desde que Leo Messi aterrizó a Florida acompañado de sus lugartenientes Jordi Alba y Sergio Busquets.

En nueve partidos que ha jugado con la camiseta rosa de Miami, Leo Messi ha marcado 11 goles y ha dado 3 asistencias, un registro decisivo para un equipo menor cuyo rendimiento le ha servido para dar un salto adelante hasta lograr el primer título de su historia y, ahora, soñar con clasificarse para el play-off de la MLSpese ir en última posición. Con Messi todo es posible y todo Estados Unidos vive pendiente de su nueva estrella que muchos entendidos consideraban caduca pero que el tiempo ha demostrado que todavía le queda mucha cuerda. Con 36 años ha ganado el Mundial y va camino de hacer algo similar de lo que protagonizó Maradona en Nápoles.

Nueva etapa

Tanta es la pasión que despierta que en el último partido no fue titular por cuestiones de guión y la afición local pidió su presencia en el campo desde el munuto 10 de partido. ‘Messi, Messi, Messi’ gritaban cuando Leo estaba sentado en el banquillo. Y es que en Estados Unidos pagan para ver a la estrella y este honor solo es para él y no conciben un receso, un descanso o un alto en el camino. Forma parte del espectáculo y Messi ha asumido este rol propio de estrellas de la NBA como si nada.

Es algo que el Barça no supo o no quiso interpretar ni hace dos años cuando le abrió la puerta desalida el día antes de decirle que le renovaba o este mismo verano cuando le daba largas para presentarle un nuevo contrato. Habrá gente en el Barcelona que no le quería de azulgrana pero, curiosamente, uno de los que menos partidario era de su regreso ya no está en el club: Mateo Alemany.

El Barça ha escrito un nuevo camino sin Leo Messi a base de muuuuuchos fichajes, un movimiento que parece interesar a los gestores de la entidad. Sin embargo, siempre quedará la duda sobre la necesidad de empezar una nueva etapa o, simplemente, se ha tirado por la borda un herencia, un legado del que ahora disfrutan otros. Messi es el fútbol y el Barça dejó escapar, en dos ocasiones, la oportunidad que tenía en sus manos.