Primera temporada post-Messi

Leo Messi celebra un gol con el PSG

Leo Messi celebra un gol con el PSG / AFP

Albert Masnou

Albert Masnou

El gol de Benzema en el descuento en el Sánchez Pizjuán es una sentencia a la competición de Liga y un puñal para el FC Barcelona, que ve cómo se le escapan las escasas opciones de plantar batalla en la lucha por la Liga. Estamos a mitad de abril y el Barça ya está fuera de todas las competiciones. Sin Supercopa de España, sin Supercopa de Europa, sin Champions, sin Copa del Rey, sin Europa League y sin Liga.

El Barça ha dejado escapar las opciones a las seis competiciones en las que ha participado por su mal hacer. Es lo que tiene tomar tarde y mal muchas decisiones. Empezando por una planificación que le dejó sin Messi y sin Griezmann y sin un goleador que supliera estas ausencias. El club tuvo que esperar a enero para intentar maquillar el desaguisado en la planificación deportiva. Durante muchos meses echó de menos a un goleador que le solucionara partidos y Koeman acabó sentenciado, más tarde de lo que debía ser. Una temporada en blanco confirma que el Barça ha sido una comparsa y no valen esos cánticos al sol de “hemos vuelto”. El Barça no ha vuelto a ningún sitio.

El Barça tomó tarde y mal las decisiones en la planificación deportiva y en el cambio de entrenador, razón por la que hemos llegado a mitad de abril sin ningún aliciente para la afición. Habrá que ver la reacción de la grada esta noche contra el Cádiz, porque no solo se unen las decepciones deportivas sino también la vergüenza vivida la noche del Jueves Santo con un Camp Nou que dejó de ser el estadio del Barça. Y se convirtió en el de los alemanes. No solo tu equipo no está a la altura, sino que te sientes robado en tu propia casa. Por decisiones propias. Y no por culpa de los socios, como algún asesor del presidente quiere hacer creer. 

Es lo que tiene el primer año post-Messi. Nos pensábamos que no pasaba nada dejar de contar con el mejor del mundo. Estaba acabado, decían. Y Messi resulta que ganó el Balón de Oro en diciembre y que desde que llegó a Francia, el PSG ha sumado hasta 10 nuevos sponsors que le convierten en uno de los clubes que más ingresa. ¿Hay la posibilidad de que vuelva?, se preguntan algunos.

Porque iba a hacerlo el PSG si desde febrero ya ha ingresado tanto por la sola presencia del argentino que le permite contar en ganancias todo lo que ingrese a partir de marzo. Hasta ahora, Messi se ha pagado él solo su salario. A partir de ahora, ya son ingresos, algo que el Barcelona no logró entender. Sin estrellas, no llegan los sponsors. Y si no hay sponsors ni turistas que compren sus camisetas, no llegan ingresos. Sin ingresos, no baja la masa salarial. La miseria solo trae miseria.