Llega la hora de los fichajes de invierno

Laporta quiere fichar

Laporta quiere fichar

Joan Mª Batlle

Joan Mª Batlle

Se acabó la pesadilla que ha significado esta Champions League para el Barça. Una Champions en la que por, mucho que nos quieran vender, casi todo se ha hecho mal. No vale con una buena primera parte en Múnich y veinte minutos apañaditos en Milán en los que el árbitro se equivocó en dos jugadas que ciertamente pudieron ser decisivas.

Pero es que el resto ha sido una sucesión de minutos infumables, de mal juego y escasez de ideas que a la postre han sido los que han dictado sentencia. Incluso ayer ante el Viktoria, el Barça se limitó a cubrir el expediente para firmar un triunfo con más goles que brillantez.

Lo más positivo, sin duda, el golazo de Pablo Torre, que tiene un buen futuro por delante. El resurgir de Ferran Torres es otra cosa, hay que valorarlo desde otro prisma. Bienvenidos sean sus dos goles, pero si somos sinceros, no deberían ser consuelo, pues no son los partidos basura los que han de marcar el nivel de exigencia a los jugadores del Barça y menos si son fichajes caros, como es el caso.

¿Y AHORA, QUÉ?


Olvidémonos ya de este mal sueño y saquemos conclusiones de cara a la Liga y a la Europa League. Si algo ha quedado claro, es que el equipo sigue con carencias que condicionan su rendimiento, aunque sea en una Liga de tan bajo nivel como la de este año o en una segunda división europea en la que habrá rivales de cierto poderío, como el Arsenal, actual líder de la Premier. Con lo que hay, vamos justitos.

Hay que seguir con la reconstrucción del equipo y reforzar posiciones que quedaron abandonadas en verano. Lateral derecho y centrocampista de recorrido que pueda hacer de Busquets, las más acuciantes. Bellerín y Kessié no han funcionado.

Ahora bien, que sean fichajes que aporten valor a futuro, que ya hemos sufrido suficientes parches en estas posiciones, muy especialmente en este lateral derecho que está siendo un vía crucis desde que se marchó Alves, hace siete temporadas ya. Es hora de fichar, pero de fichar bien, no solo pensando en el corto plazo, que no hay tiempo que perder ni dinero para tirar.