El dilema del quinto central para el Barça

Los jugadores del Barça, atentos a una charla de Xavi

Los jugadores del Barça, atentos a una charla de Xavi / FCB

L. Miguelsanz

L. Miguelsanz

Xavi siempre quiso revolucionar la defensa en su proyecto deportivo para poder aspirar a ganar títulos. El técnico tenía muy claro que con lo que había en la plantilla atrás no le daba para competir en Europa, donde sufrió especialmente encajando mucho a partir del mes de enero.

A Xavi, prácticamente, solo le encajaba Araujo en el centro de la zaga y asumía que había serios problemas en los laterales. Es por ello que una de sus grandes peticiones fue firmar a tres o cuatro futbolistas experimentados y de nivel y completar la revolución dando salida a una gran parte de sus efectivos. El Barça ya decidió dar salida a Alves y Lenglet puede ser hoy jugador del Tottenham. El plan se completaba con la marcha de Umtiti y Mingueza, mientras que Dest se ha salvado por la campana o porque, hasta el momento, no ha llegado la oferta oportuna para todas las partes. La llegada de Christensen, totalmente avalada por el técnico, es una primera piedra de esta nueva defensa, pero faltan los dos laterales y habrá que ver lo que sucede con el quinto central. Porque los marcadores de primer nivel tienen precios por las nubes y la fiesta del dinero no va a dar para todo. 

De lo que no hay casi ninguna duda es que Xavi tendrá a Azpilicueta y a Marcos Alonso para cubrir la falta de laterales. El zurdo, incluso, es mucho más necesario que el diestro porque Balde no cuenta y Jordi Alba hace demasiados años que está muy solo. Y para el centro, tras la llegada de Christensen, a Xavi le gustaría tener a Koundé, un quinto central que llegaría para competir con el danés, Eric Garcia, Araujo y un Piqué que podría tener un papel más que residual en esta historia siendo uno de los jugadores mejor pagados de la plantilla. Y es ahí donde entran las dudas y los cálculos económicos.

Nadie duda que Koundé es un jugadorazo de primer nivel. Un futbolista que puede marcar una época, pero ahora mismo la prioridad del club está en firmar arriba. Y luego se verá. Eso no quiere decir que se descarte nada, solo que hay debate interno y, sobre todo, mucha presión para que el Sevilla rebaje de una vez por todas sus pretensiones con el francés, que ahora está lesionado. Xavi va a seguir presionando porque quiere a lo mejor del mercado, pero la directiva acabará decidiendo y, hoy por hoy, la pasta va a ir por Lewandowski, Raphinha y, si se vende a De Jong, por el sueño de Bernardo Silva. El quinto central sigue vivo si el dinero lo permite.