Saber defender también es positivo

Me gustaría que esta victoria no pasara por el cedazo de la opinión pública sobre si es consecuencia de una deriva táctica que aleja al Barça de su ADN y por ello se discuta la calidad del juego del equipo. Extrañamente, pasó con el 0-1 del jueves en la Copa en el Bernabéu, donde el equipo, sin tres de sus jugadores clave, Lewandowski, Pedri y Dembélé, forjó un gran triunfo frente al Madrid.

Cuesta creer que ganar al Madrid en su propio campo sea motivo de controversia y de cierto desencanto. Miren, ganar al Madrid siempre es motivo de alegría y consecuencia de un buen rendimiento, que éste sea ofensivo o defensivo es lo de menos y sobre todo, en las circunstancias en las que el equipo acudió a Chamartín. Y ayer, lo mismo. Más de media hora con diez jugadores por la expulsión de Araujo justifican el relativo sufrimiento por el que se hubo de pasar. No caigamos en la trampa que nos tienden desde Madrid para quitar méritos al liderato del Barça.

Saber defender también es positivo y sabe... Y este Barça de Xavi, sin duda, sabe defender. Solo ocho goles encajados en veinticuatro partidos y únicamente uno en el Camp Nou, y de penalti, ante el Espanyol. Por ahí se está forjando el camino hacia el título. Y adquiere mayor importancia cuando el equipo enfrenta las adversidades en forma de lesiones y sanciones que últimamente la caen encima.

Ante el Valencia, la roja a Araujo obligó a sacar carácter y capacidad de sufrimiento. Y ello, además, tras un penalti fallado y un tiro al poste. De un posible 3-0 a quedarse con diez con 1-0.

Por cierto, conviene analizar el penalti y el poste porque reflejan el momento complicado por el que pasa Fati. A la hora de ejecutar la pena máxima, Ferran y Ansu se disputaron el balón en una discusión significativa. Ansu tiene tantas ganas de marcar un gol, que se pidió el lanzamiento con mucha insistencia. Al final lo tiró, y lo falló, Torres. Y a Ansu solo le faltó rematar al poste en la siguiente acción y ser el gran perjudicado de la expulsión de Araujo. No tiene suerte el “10” y el mejor consejo que se le puede dar es que no se deje llevar por la ansiedad.