Y Abel Ruiz y Sergio Gómez, en la recámara

Sergio Gómez y Abel Ruiz celebrando un gol cuando los dos estaban en el infantil A

Sergio Gómez y Abel Ruiz celebrando un gol cuando los dos estaban en el infantil A / sport

Albert Masnou

Albert Masnou

Bendito problema tiene el Barça con el fútbol base. Tras varios años de ostracismo, aferrados a infantiles y cadetes de enorme proyección, en el mejor de los casos, ahora resulta que Valverde va y alinea a varios futbolistas del Barça B. Y, por si fuera poco, los Arnaiz, Aleñá y compañía superan, y con nota, los exámenes del primer equipo. Nada que ver con el escenario de hace solo unos meses.

Pero vayamos un poco más allá. Valverde disfrutó con los más jóvenes en la Nueva Condomina y ayer, si le apeteció o tuvo tiempo, seguro que también se lo pasó en grande viendo las semifinales del Mundial Sub-17. Entre otras cosas, porque seguro que está al corriente de dos joyas que tiene, a día de hoy, a su entera disposición: Abel Ruiz y Gómez. Talento en potencia. Motivos para confiar en esta cantera no le faltan, aunque no todo son alegrías.

Por ejemplo, los internacionales de esta Sub-17 son un pequeño islote en unos juveniles del Barça que, según los entendidos, no son precisamente para tirar cohetes.

Pero vayamos a las grandes decisiones que debe abordar el club: ¿serán capaz de blindar a las grandes estrellas y evitar, a toda costa, su fuga a la Premier? ¿El club tiene intención de enviar un mensaje claro y nítido a los jugadores, padres y agentes para evitar los flirteos continuos con los City, United, Chelsea...?

Y resuelto este punto, falta el otro eslabón que, de momento, parece ir por buen camino. Olvidada la etapa Luis Enrique, la apuesta de Valverde por la cantera irá más allá de los ascensos protocolarios o realmente los Arnaiz, Aleñá y otros que puedan llegar disputarán minutos de calidad y su presencia en la primera plantilla será algo habitual. Preguntas que merecen respuestas si, de verdad, la cantera quiere acabar de cobrar el protagonismo perdido.