Wizards y el 'drama' del peor equipo en la NBA

Los Washington Wizards están tocando suelo en este primer tramo de temporada NBA

Jordan Poole, que llegó el pasado verano desde Warriors, no está siendo el líder que esperaba la franquicia capitalina

Kyle Kuzma, jugador de los Washington Wizards

Kyle Kuzma, jugador de los Washington Wizards / ROB CARR

Nil Jaimejuan

Nil Jaimejuan

El arranque de temporada NBA está dejando muchos titulares en positivo: Las magníficas sensaciones de Celtics, las irrupciones al estrellato de hombres como Maxey o Anthony Edwards o incluso la férrea pelea entre 'Wemby' y Holmgren por el Rookie del año, pero hay una franquicia sumida en el fracaso más absoluto. Son los Washington Wizards, al que muchos expertos ya consideran como el peor equipo de toda la competición.

Poco esperábamos de un equipo que abría la temporada con una de las plantillas menos talentosas de toda la liga. El pasado verano la gerencia decidió dar un golpe sobre la mesa y traspasar de una vez por todas a Bradley Beal, jugador franquicia que, desde que fuera seleccionado en el pick 3 del draft allá por 2012, se había convertido en uno de los mejores anotadores de toda la liga. El escolta ya es historia en la capital, haciéndose ahora un hueco en los Phoenix Suns.

SIN RUMBO EN EL ESTE

El cuadro de Washington ostenta el segundo peor balance de toda la NBA con 2 victorias y 10 derrotas, tan solo superados por unos jovencísimos Detroit Pistons (2-12) a los que, a priori, les depara un mejor futuro. Mientras que los de Michigan sueñan con la evolución de 'rising stars' como Cunningham, Duren, Ivey o Ausar Thompson, en los Wizards nadie sabe quién tomará las riendas de un proyecto que lleva dando 'palos de ciego' demasiado tiempo.

Sin lugar a dudas, los de Washington poseen una de las plantillas peor confeccionadas de toda la competición, algo que se explica muy fácil desde los despachos. El quinteto inicial conformado por Tyus Jones-Poole-Avidja-Kuzma-Gafford no suena muy prometedor para cualquier equipo que quiera luchar para ocupar un hueco en los playoffs.

En lugar de traspasar a Beal y obtener capital de draft valioso en un momento en el que se veía que la franquicia naufragaba por completo en el Este, se decidió seguir renovando a Bradley hasta convertirlo en uno de los mejores pagados de toda la NBA. En julio de 2022, equipo y jugador firmaron una superextensión de 5 años y 251 millones, un 'matrimonio' que nadie se creyó.

Bradley Beal baloncesto, Estados Unidos) USD 38 millones

Bradley Beal, ahora en Phoenix, fue el gran valuarte de Wizards durante una década / AGENCIAS

Tan solo un año más tarde, los Wizards lo empaquetaron con dirección al desierto de Arizona por Chris Paul (no llegó ni a aterrizar en DC), Landry Shamet y un paquete de rondas de Draft no demasiado atractivo. La realidad es que la imagen (sobre todo defensiva) de estos Wizards transmite sensaciones paupérrimas, y es que cuesta encontrar jugadores con los que confiar para el proyecto de futuro.

NÚMEROS TÉTRICOS

Jordan Poole y Kyle Kuzma son los dos supuestos puntales de este equipo, el primero de ellos llegado esta pasada 'offseason' desde Golden State Warriors, con quién ganó el anillo en 2022. Entre ambos suman un salario total de 52 millones por temporada, unas cifras que distan mucho de su producción en cancha. Son dos perfiles interesantes y con capacidad anotadora, pero sus alarmantes carencias en la selección de tiro y en defensa hacen muy difícil pensar en ellos como los 'cimientos' de los Wizards del futuro.

Mientras que Kuzma aguanta el tipo con 23.5 puntos por contienda, el ex de Warriors promedia tan solo 15.5 puntos por choque con un 27.8% en tiros de tres. No son los datos que esperaba Wes Unseld Jr de su mejor hombre. Poole incluso ha sido carne de 'meme' los pasados días por sus grotescas desconexiones en los tiempos muertos de su equipo, algo que habla muy bien (en el peor sentido de la palabra) de su ego.

Si hay algo que preocupa a los capitalinos es la defensa, unidad a la que algunos expertos catalogan ya como de 'amateur'. Estos son los números:

  • 28o puntos encajados por partido (122.9)
  • 27o puntos recibidos en la pintura (56.3)
  • 30o rebotes encajados por encuentro (58.6)

Ni Tyus Jones es un 'cerrojo' en la posición de base ni Gafford intimida lo suficiente en la pintura, un cóctel que está pasando factura a los de Washington. Ver defender a este equipo resulta cuanto menos desesperante, tanto en el ataque estático rival como en transiciones, donde la actitud y la garra brilla por su ausencia.

Ahora mismo no hay demasiados motivos para ilusionarse con esta franquicia en un futuro cercano, pero hay dos jugadores que parecen dar ciertas esperanzas al conjunto capitalino.

MIMBRES PARA EL FUTURO

Bilal Coulibaly está siendo la nota más positiva en Washington. El francés fue la gran apuesta en el pasado draft, y es que los Wizards, en un traspaso con Indiana Pacers, 'subieron' hasta el puesto número 6 y se hicieron con sus servicios, un alero con mucha versatilidad en la posición de '3'. Compañero de Wembanyama en los Metropolitans 92, el galo parece estar adaptándose cada vez mejor al ritmo de la liga, yendo de menos a más hasta convertirse en el hombre más eficiente en cancha para Unseld Jr.

Bilal Coulibaly (izquierda) es la gran esperanza de Wizards

Bilal Coulibaly (izquierda) es la gran esperanza de Wizards / USA TODAY

Firmó su mejor actuación ante Brooklyn Nets con 20 puntos, 7 rebotes y un magnífico 4/7 en triples, unos guarismos ofensivos que no taparon su buen desempeño atrás. Coulibaly posee un físico privilegiado para defender todas las posiciones exteriores, algo que gusta y mucho en el baloncesto actual.

Otro que mejora con el paso de las semanas es Deni Avidja, novena elección de Wizards en el Draft de 2020 al que le costó sus primeros pasos en la NBA, pero que ahora demuestra por qué llegó a la liga como uno de los mejores 'prospects' del viejo continente. El ala-pívot israelí está mejorando en todas las estadísticas: 13.2 puntos, 3.8 asistencias y 42% desde la larga distancia, nada mal para un hombre que ve muy limitado sus tiros por culpa de las 'idas de olla' de Jordan Poole y compañía.