Ona Carbonell, plata provisional en el Mundial

Ona Carbonell, durante su primer ejercicio en Budapest

Ona Carbonell, durante su primer ejercicio en Budapest / afp

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Ona Carbonell ha comenzado de la mejor forma posible su programa de competición en el Mundial de natación que arranca este viernes en Budapest. La nadadora barcelonesa ha conseguido la segunda mejor puntuación en el preliminar de Solo técnico, que ha dominado la rusa Svetlana Kolesnichenko.

Carbonell, que se sitúa en posición de plata provisional, ha adelantado en la clasificación a otras aspirantes a medalla, como la japonesa Yukiko Inuki y la ucraniana Anna Voloshina, tercera y cuarta, respectivamente.

Carbonell ha sumado un total de 92,3893 puntos por 94,0229 de Kolesnichenko y 90,8837 de Inui. La final del solo técnico se nadará este sábado a partir de las 11:00 horas.

Vestida con un llamativo bañador que la transformaba en una serpiente, la elegante Carbonell reptó sobre la piscina acompañada por la música que Peter Gabriel compuso para la película "La última tentación de Cristo".

Se quedó a solo 1,6336 puntos de la gran favorita, Kolesnichenko, la que fue una de las más jóvenes componentes del equipo ruso, tricampeón del Mundo.

Además Carbonell superó a la rusa en impresión artística (28,3000 por 28,1000), aunque Kolesnichenko cimentó su ventaja en la puntuación en elementos (36,0893 por 37,5229).

Ahora con 23 años y nueve oros mundiales, Kolesnichenko opta a cuatro oros, dos en las competiciones de solo y otros dos en el dúo con su compatriota Alexandra Pastkevich.

Para conseguir la mejor puntuación utilizó un fragmento de la canción de Solveig de la obra Peer Gynt de Edvard Grieg, una versión de Anna Netrebko y Emmanuel Villaume acompañados por la Filarmónica de Praga.

En una rutina que duró 2:12 minutos, Kolesnichenko estuvo muy brillante en la ejecución (28,4 sobre 30). Si la rusa respondió a la expectativas, Carbonell también. La catalana, prácticamente la única esperanza de medalla del equipo en sincronizada, debido a la renovación generacional, nunca falla. 

Seguramente Ona está en su mejor momento deportivo. Con 27 años, sabe que tiene explotar al máximo su flexibilidad y ha añadido plasticidad y nuevos elementos para lo que ha contado con la ayuda de la entrenadora Esther Jaumà. El bañador que ha lucido Carbonell es un diseño de Cristina Real, de la Escuela de Diseño de Sabadell, y le ha dado vistosidad a un ejercicio muy artístico y que ha venido perfeccionando en los últimos meses en las Series Mundiales que ha nadado.

Si como parece Carbonell se cuelga este sábado una medalla, sea del metal que sea, habrá conseguido su vigésimo primera en un Mundial y habrá superado las 20 que tiene Gemma Mengual. Solo las rusas Svetlana Romashina y Natalia Ischenko, ambas con 22, tienen más.