Gran partido de las Guerreras ante una Noruega que las atropelló

La selección española jugó una gran primera parte, pero en la segunda Noruega fue un rodillo

Lunde con un 38% de paradas fue determinante en el triunfo de Noruega

La portera Katrin Laude fue vital en la victoria de Noruega ante España en Granollers

La portera Katrin Laude fue vital en la victoria de Noruega ante España en Granollers / VALENTÍ ENRICH

Àngels Fàbregues

Àngels Fàbregues

Ganarás o perderás, esto es deporte, pero la selección española de balonmano lo dio todo este viernes ante Noruega, la máxima potencia del balonmano femenino, y en la primera parte supo poner entre las cuerdas a las nórdicas sabiendo leer en todo momento el juego conveniente y la estrategia a elegir. Solo en la segunda mitad bajaron el ritmo ante una defensa impenetrable y cedieron demasiado terreno hasta perder por 27-21.

Noruega - España

Mundial Balonmano

27
21
Alineaciones
Noruega
(11+16): Katrine Lunde (Silje Solberg ps), Sanna Solberg-Isaksen (3), Veronica Kristiansen (3), Stine Oftedal (1), Nora Mörk (8, 3p), Kari Brattset (7) y Malin Aune-siete inicial-; Henry Reistad (3), Emilie Arntzen, Vilde Ingstad, Moa Hoghdahl, Marit Jacobsen (1), Camilla Herrem, Kristine Breistol y Maren Aardahl (1)
España
España (11+10) Silvia Navarro (Merche Castellanos), Carmen Martín (2), Carmen Campos (1), Almudena Rodríguez, Kaba Gassama, Alexandrina Barbosa (5) y Jennifer Gutiérrez (3,1p)-siete inicial-; Silvia Arderius (1), Eli Cesáreo (2) Irene Espínola, Paula Arcos (3), Maitane Etxeberría (1), Soledad López (1), Alícia Fernández (1) y Ainhoa Hernández (1).

La primera mitad fue un excelente dibujo de como hay que jugarle a la campeona olímpica. El partido se inició a un ritmo trepidante con rápidos contraataques en ambos equipos que solo las grandes intervenciones tanto de Silvia Navarro como de Katin Lunde, ambas con 41 años de experiencia en este mundo, impidieron que el marcador fuera más abultado. De esta manera, la Guerreras conseguían dos cosas. Una mantenerse en el partido en todo momento, otra, crear dudas en el rival que veía como la enorme defensa hispana le impedía desarrollar su balonmano habitualmente fluido.

Los primeros diez minutos fueron de tú a tú y el marcador reflejaba un 4-3 que mantenía la contienda totalmente abierta en la que España se sobrepuso a la temprana lesión de Almudena Rodríguez en el hombro. Pero gracias a anticipaciones como las que protagonizaron Carmen Martín o Silvia Arderius y sobre todo las paradas de Navarro contrarrestaron a una Nora Mork excelsa y al muro Lunde que tapaba las finas y escasas fisuras de la defensa noruega una y otra vez.

Tras unos minutos de 'desconexión' de las españolas, totalmente comprensibles tras haber ofrecido un ritmo estrepitoso, Prades se vio obligado a pedir un tiempo muerto (6-3 en el 16') para reconducir a sus jugadoras. Poco a poco las guerreras se despojaron de los nervios de jugar un partido tan importante ante su público, que apretó en todo momento, y volvió a la concentración defensiva y a ver como fluía mejor en ataque de manera que del 8-5 se pasó al 11-11 del descanso. El desgaste era brutal, el nivel físico ofrecido encomiable y el balonmano era de campeonas.

El primer paso se había conseguido. Cerrar la primera mitad sin conceder un ápice a Noruega. A la vuelta de los vestuarios las cosas se complicaron de nuevo porque Mork y Brattset no fallaban goleando, asistiendo y moviendo a la defensa española para crear huecos a sus compañeras.

Sin recortar distancias

Volvieron los tres goles de ventaja para las nórdicas y Prades, que lleva solo tres meses al frente de las Guerreras, pidió de nuevo tiempo muerto para recuperar sensaciones y evitar pérdidas de balón como las que se observaron en esos primeros minutos.

Pero el equipo noruego es de esos cansinos, que no te da respiro, y cuando consigues un parcial de 0-2, responden con la misma moneda y vuelven a la ventaja anterior. Desesperante para las hispanas. Come la moral este juego y Nora Mork lo sabe a la perfección e insistió en hurgar en esa herida cuya sangre se convertía en goles. En el 43' Noruega estaba 19-15 arriba y en el 45' ya era 21-16 el marcador.

Ni con doble exclusión

La intensidad noruega tanto defensiva como en ataque no bajaba en ningún momento y con cinco goles arriba optó por un juego más de pizarra, con más ataques en estático igual de eficaces. Tanto que el 22-16 del minuto 49 era ya una losa muy pesada para cargar 11 minutos.

Una doble exclusión para Noruega abrió una ventana a la esperanza, pero ahí estaba Lunde, a la postre la mejor del partido, para evitar que España volviera al partido. No pudrieron aprovecharlo y ahí se acabó el partido.

Al final una ventaja demasiado amplia para las noruegas que van directas a otro título mundial tras imponerse por 27-21. El domingo espera Dinamarca con una medalla de bronce en juego en un partido donde las españolas llegarán con una derrota, pero con buenas sensaciones.