La Yamaha M1 le 'escribe' una carta de despedida a Rossi

La moto con la que alcanzó la gloria protagoniza la curiosa despedida de Yamaha a Valentino

"Desde nuestro primer beso en la hierba de Welkom hasta nuestro último baile en Valencia hemos vivido muchas aventuras extraordinarias", subraya

Valentino y Yamaha, una historia de 'amor'

Valentino y Yamaha, una historia de 'amor' / motogp

Laura López Albiac

Laura López Albiac

El Gran Premio de Valencia 2021 ha sido el último de Valentino Rossi, que ha puesto un emotivo broche a sus 26 temporadas en el Mundial y ha provocado el delirio en las gradas de Cheste. Yamaha ha querido rendirle su particular homenaje y ha elegido una insólita forma de despedirse: Con una carta 'escrita' por su moto, la M1, el modelo con el Rossi alcanzó su mayor gloria y logró cuatro de sus nueve títulos mundiales, tras pilotarla desde 2005 hasta 2010 y de nuevo, tras el periplo en Ducati, a partir d 2013 hasta su última carrera.

La carta dice así:

Valentino, todo el mundo se ha despedido de ti. Sólo faltaba una despedida de alguien a quien aprecias mucho y aquí está: 

Puedo recordar el sábado 24 de enero de 2004 como si fuera ayer.

Nuestra primera cita en Malasia. Llevaba mucho tiempo esperando a alguien como tú.

Estaba nerviosa, pero fue amor a primera vista para los dos.

Supe al instante que nuestra relación sería algo realmente especial.

Tuvimos esa innegable chispa que ocurre solo una vez en la vida, y todas las piezas del rompecabezas simplemente encajaron.

Nunca olvidaré cómo nos detuvimos en el césped de Welkom en 2004.

Los dos solos, dándonos cuenta de que tú y yo juntos teníamos razón, y que esto era sólo el principio.

Ganamos cuatro títulos de MotoGP y 56 carreras juntos.

Llevamos la alegría a millones de personas en todo el mundo y creamos recuerdos para toda la vida.

Hicimos historia, porque trabajamos como uno solo y sacamos lo mejor de cada uno.

Me hiciste fuerte de nuevo.

Hiciste que me respetaran de nuevo.

Hiciste que me volvieran a amar.

Sólo tú, Valentino, tenías el poder de hacerlo.

Y yo confié plenamente en ti.

Te apoyé de todo corazón.

Luché todas tus batallas contigo.

Sólo yo fui capaz de hacer que el deporte de motor fuera emocionante para ti hasta el final.

Desde nuestro primer beso en la hierba de Welkom hasta nuestro último baile en Valencia este año hemos vivido muchas aventuras extraordinarias.

Y luego estuvieron nuestros momentos especiales, como Laguna Seca en 2008 y Catalunya en 2009.

Nadie se movía como nosotros en aquella época, ¿verdad?

También en Assen en 2009, cuando te ayudé a ganar tu carrera número 100.

¡Fue mágico!

Te he llevado durante 16 años de tu increíble carrera.

Pero tú también me has llevado en tu corazón.

De Mugello a Motegi, de Silverstone a Sepang y de Barcelona a Buriram, siempre hemos estado ahí el uno para el otro.

Te he dado todo, como tú lo hiciste conmigo.

Lo único que siempre atesoraré son nuestras conversaciones en la parrilla.

Éramos tú y yo contra el mundo.

Tú y yo éramos "pilotar o morir".

Pero, por desgracia, incluso las más bellas historias de amor llegan a su fin.

Valentino, eres parte de mí.

Parte de mi historia.

Parte de lo que soy hoy y de lo que seré mucho después de que nos separemos.

La nuestra es una conexión realmente especial, y te voy a echar de menos más de lo que nunca sabrás.

Grazie, Valentino.

Con amor,

Tu YZR-M1