La remontada que le espera a Márquez

"Yo lo veo posible. Márquez aún puede ganar este Mundial", considera Valentino Rossi. "Para mí, Marc sigue siendo el más rápido y el que mejor ritmo tiene siempre, en cualquier circuito, aunque Fabio (<strong>Quartararo</strong>) ya se ha convertido en un adversario muy peligroso y los 50 puntos que ha sacado serán difíciles de recortar". El diagnóstico de 'il dottore', que este domingo en Jerez regresó al podio (3º) después de un año de sequía, es más que realista. El francés Quartararo se ha consolidado en el liderato, pero cuando Márquez esté recuperado de su lesión en el brazo derecho, la lucha será épica.

Hasta el 'Diablo' reconoce que "con Márquez en pista será más difícil seguir ganando". Con ocho títulos mundiales a los 26 años y cinco de seis posibles en MotoGP, el campeón de Honda se ha ganado sobradamente un margen de confianza. "Si no se puede ganar este campeonato, no se puede, pero por nuestra parte no quedará, vamos a intentarlo con todas las fuerzas", aseguraba Marc antes de marcharse de Jerez el sábado, rendido a la evidencia de que no podría correr después de operarse el martes de una fractura de húmero del brazo derecho.

El récord de Rossi

Márquez tiene a tiro este año un récord que le hace especial ilusión: los siete títulos de Valentino Rossi en la clase reina de MotoGP. Pero desde el principio ha encontrado obstáculos en su camino. Tras operarse de su recurrente lesión en el hombro derecho a finales de noviembre, Marc llegó muy justo de forma a la pretemporada y todo apunta a que habría disputado el GP de Catar sin estar al cien por cien. Pero la pandemia paralizó el Mundial, la carrera de Losail no se celebró y el campeón afrontó el confinamiento como una oportunidad para recuperar el tono físico.

Cuando por fín arrancó el Mundial en Jerez, el pasado 19 de julio, Márquez sufrió una de las caídas más duras de su carrera deportiva, fracturándose el húmero del brazo derecho. Después de pasar por el quirófano el pasado martes en Barcelona, el de Cervera se probó este sábado, en la víspera del segundo gran premio de la temporada, también en Jerez, para ver si podía abordar la carrera con garantías. No lo consiguió y tras contabilizar el segundo cero en su cuenta, el Mundial se le ha puesto muy cuesta arriba. Especialmente porque Fabio Quartararo ha aprovechado su ausencia para reivindicarse con un sensacional doblete que le otorga 50 puntos de ventaja.

El vigente campeón nunca ha conseguido conquistar el título tras no puntuar en la primera carrera, por lo que la gesta sería histórica si lo lograra en 2020. En 2009, en 125cc, no pudo acabar la carrera inaugural de Catar y terminó octavo en la general del Mundial. Y en 2011, ya en Moto2, no puntuó en los dos primeros grandes premios (Catar y Jerez) y aunque llegó al final de temporada en condiciones de pelear por el título con Steffan Bradl, sufrió otra caída y una grave lesión en el nervio óptico que le impidió completar su remontada. Concluyó aquel curso en segunda posición, a 23 puntos del campeón Bradl.

Más difícil todavía

Ahora Marc necesita recortar 50 puntos en 11 carreras, que podrían ser algunas más si antes del 31 de julio los organizadores del Mundial logran incluir Tailandia, Malasia y Argentina a un calendario marcado por el Covid-19. Obviamente, cuantos más grandes premios tenga por delante, más crecerán las opciones de Márquez de revalidar su corona.

El piloto de Honda se mostró optimista en Jerez: "Si estoy aquí hoy es porque lo veo posible", respondió contundente cuando le preguntaron por sus posibilidades de ser campeón en 2020. Uno de los argumentos que le dan la razón es que antes de irse al suelo y lesionarse en Jerez, Marc demostró un ritmo de carrera muy superior al de todos sus rivales, incluídos Quartararo y Viñales.

"Por supuesto que es una ventaja cuando un rival tiene dos ceros, y más en un campeonato tan corto como el de este año. Pero al final, si miras los resultados de Marc el año pasado, aparte de Austin, lo peor que sacó fue un segundo puesto. Y seguro que volverá fuerte para Brno", analizó un prudente Quartararo.

Márquez tendrá ahora dos semanas de descanso para tratar de llegar al GP de la República Checa en las mejores condiciones, dónde ganó la pasada temporada, si bien todo apunta a que su asalto al liderato empezará de verdad en las dos siguientes citas de Austria, un circuito más propicio a las Ducati.