El 'porpoising', una pesadilla para Mercedes en Italia

Los primeros libres del Gran Premio de Emilia Romagna, disputados en condiciones de agua, han sido un desastre absoluto para Mercedes. El problema del 'porpoising' les ha afectado de forma muy aparatosa durante la sesión, en la que George Russell ha acabado décimo y Lewis Hamilton, decimoctavo. El jefe del equipo, Toto Wolff, ha explicado que el efecto rebote ha sido tan grave que se ha roto un soporte del suelo del coche de Russell.

El W13 echaba chispas cada vez que tocaba el suelo y Wolff reconoce que el monoplaza era inconducible: "No puedes pilotar, tienes que levantar el pie en la recta. Los pilotos están entrenados (para esto) pero yo nunca he experimentado rebotes como estos en mi vida", ha señalado el austríaco.

También Ferrari, líder del campeonato, ha sufrido severo 'porpoising', pero a diferencia de Mercedes, la Scuderia no pierde ritmo por tener que hacer cambios en la puesta a punto. "Su porpoising parece un poco diferente al nuestro. Nuestra frecuencia parece más alta y la principal diferencia es que, cuando pisan los frenos, su coche se estabiliza, el nuestro no", ha analizado el jefe de Mercedes.

Russell ha concluído a casi cinco segundos del líder de la FP1, Charles Leclerc, con Hamilton otros dos segundos más atrás. Según Wolff esta gran diferecia de tiempos se ha debido "al problema para conseguir agarre con el neumático por la temperatura. Los Ferrari parecen desbloquear eso, todos los demás están más o menos en el mismo sitio. Los comentarios que estamos recibiendo de Lewis y George es que hay literalmente cero agarre y que estas diferencias apuntan a los neumáticos".