La odisea de De Vries por las inundaciones en Imola

El piloto de AlphaTauri, Nyck de Vries relata sus peripecias de camino a la sede del equipo en Faenza

Carreteras y puentes estaban cerrados debido a las inundaciones, no pudo llegar a su hotel y finalmente un miembro de McLaren le dejó una habitación

Imagen captada por De Vries durante su trayecto a Faenza

Imagen captada por De Vries durante su trayecto a Faenza / instagram

SPORT.es

SPORT.es

"Martes por la noche, 23:30h, de camino a Faenza antes de un día de marketing en la fábrica el miércoles. Llueve intensamente, Faenza ya está inundada y soy incapaz de llegar a mi hotel. Volver a la autopista tampoco es una opción". Así comenzaba el relato de Nyck De Vries, piloto de Alpha Tauri, que vivió una auténtica odisea y tuvo que desistir de llegar a la sede de su equipo a causa de las graves inundaciones que asolaron la región de Emilia Romagna, al nordeste de Italia, obligando a cancelar el gran premio de F1 que iba a disputarse este fin de semana en el circuito de Imola, completamente anegado.

El neerlandés se vio "atrapado en un pueblecito con un hotel totalmente lleno" y tuvo la suerte de poder encontrar una habitación para pasar la noche: "El personal de McLaren también se había quedado tirado allí y su encargado del gato delantero, Frazer tuvo la amabilidad de cederme su habitación", cuenta De Vries que explica que "a la mañana siguiente, el vestíbulo del hotel se convirtió en un refugio de emergencia para las personas que se vieron obligadas a escapar de sus casas durante la noche".

La sede de Alpha Tauri está en Faenza, una población cercana al circuito de Imola (a 20 km), que fue una de las más afectadas por las lluvias torrenciales caídas desde el martes. El equipo ha abierto una línea para ayudar a la gente de esta localidad.

"Muchos lo han perdido todo", lamentaba Stefano Domenicali, presidente de la F1 y natural de la región, al comentar la difícil decisión de anular la carrera en Imola. También Yuki Tsunoda, compañero de De Vries, se sumó a los mensajes de solidaridad.

Una vez se conoció oficialmente la cancelación del gran premio, De Vries abandonó la zona lo más rápido que pudo: "Después del anuncio de F1, solo vi una opción potencial para llegar a casa, que era conducir a través de Florencia. Después de un viaje lleno de aventuras a través de las montañas, gracias a la ayuda de la gente local y las autoridades de diferentes pueblos, finalmente llegué a casa sano y salvo", concluye.