LONDRES 2012

Bychkov terminó duodécimo en pértiga

Igor Bychkov logró superar los 5,50 metros, una marca que le ha dado el duodécimo puesto entre catorce.

EFE

Igor Bychkov, primer español que disputaba una final olímpica de pértiga en doce años, ha conseguido, al fin, realizar un salto válido en el concurso por las medallas de unos grandes campeonatos al superar los 5,50 metros, una marca que le ha dado el duodécimo puesto entre catorce.

Por detrás de él terminó el campeón olímpico y defensor del título, el australiano Steven Hooker, que falló en su primera altura (5,65).

Desde que el vizcaíno Montxu Miranda obtuvo el noveno puesto en los Juegos de Sydney 2000, ningún otro pertiguista español había estado en una final olímpica.

Bychkov, de 25 años, ya había estado en la final de unos campeonatos de Europa (Helsinki 2012) y de unos Mundiales (Daegu 2011), pero en ninguna de ellas fue capaz de saltar la primera altura que intentaba: 5,40 en el Europeo, 5,50 en el Mundial.

Su salto de hoy (5,50 metros, a la tercera) ha sido, por tanto, el primero válido de Bychkov en la final de unos grandes campeonatos.

Ese era su primer objetivo. El segundo, más ambicioso, era conseguir diploma olímpico, es decir, terminar entre los ocho mejores de los Juegos. Este quedará para otra ocasión.

Con una marca personal de 5,60, conseguida el año pasado, y un mejor salto de 5,56 esta temporada, Bychkov volvía a enfrentarse al reto de empezar directamente en marcas que para él se aproximan a sus mejores del año, y de tener que saltar cada muy poco tiempo, porque la mayoría de sus rivales renuncian, por ser alturas demasiado bajas para ellos, o las superan.

Cuatro minutos después de fallar su segundo intento, Bychkov volvió a empuñar la pértiga, pero esta vez rodó limpiamente sobre el listón. El público premió su esfuerzo con una gran ovación.

La barra fue situada, a continuación, en 5,65, cinco centímetros por encima de su récord personal. Abortó los dos primeros saltos, y en el tercero estuvo muy cerca de pasar.

Bychkov, nacido en Donetsk (Ucrania), como el actual plusmarquista mundial, Sergey Bubka, se trasladó a España con 11 años y desde 2007 tiene la nacionalidad española.