Lozano, el único cedido que brilla

Con el descenso debajo del brazo y la misión de diseñar una plantilla capaz de luchar por todo, el Girona se ha pasado el verano dando altas y bajas. Mil y un retoques que, de momento, no han dado sus frutos. Para aligerar la plantilla, se tomó la decisión de ceder a algunos futbolistas. Hasta siete jugadores; no todos forman parte del primer equipo, pero todos han llegado a entrenar con el grupo principal. La aventura, hasta ahora, no les sonríe a todos por igual.

Con diferencia es el Choco Lozano quien más la está aprovechando. No le salieron las cosas en Montilivi al hondureño. En 41 partidos oficiales marcó apenas 3 goles y nunca llegó a ganarse la confianza del técnico de turno. Tampoco Juan Carlos Unzué. Al no llegar ninguna buena propuesta para cerrar un traspaso, se le ha cedido al Cádiz. Justo donde ha empezado a brillar. Ha necesitado seis partidos para ello. 445 minutos en los que ya ha marcado 4 goles. Más de los que ha logrado en toda su etapa como rojiblanco.

Cara y cruz

Lozano es la luz. Bono y Bernardo, la oscuridad. El primero, en Sevilla, apenas cuenta con 90 minuts en la Europa League. En la liga vive a la sombra de Thomas Vaclik y todavía no ha debutado. El central tampoco ha participado mucho con el Espanyol. Ni un solo minuto en Primera pero sí que se le ha visto en competición europea: 3 partidos completos en las eliminatorias previas de la Europa League. No contaba mucho para David Gallego, aunque esta situación puede cambiar con un Pablo Machín que le conoce a la perfección.

Por su parte, Kévin Soni ha jugado 301 partidos (un gol) con el Espanyol B y Álex Pachón cuenta con 32 minutos y un tanto con el Andorra. Maxi Villa ha participado en 220 minutos con la Ponfe en Segunda División A, mientras que Iago López es titular (450 minutos, 5 partidos) con la UD Logroñés.