¿Por qué se juegan los partidos a puerta cerrada?

Este martes conocíamos la decisión adoptada por el Ministerio de Sanidad español de la disputa de los inminentes compromisos europeos del Valencia y Getafe a puerta cerrada. En el caso del conjunto valenciano se trata del choque de la próxima semana ante el Atalanta previsto para el 10 de marzo. En lo que afecta al club madrileño se trata de la vuelta de la Europa League ante el Inter del Milan que se jugará el 19 de marzo.

Estas medidas comunicadas por el propio Ministro de Sanidad, Salvador Illa, responde a una clara intención de evitar la posible propagación de coronavirus en España. Porque ambas zonas de los clubes italianos implicados, tanto Atalanta como Milán, están dentro de las zonas de riesgo reconocidas por el propio gobierno italiano. Así de hecho la manifestaba el propio ministro de Sanidad español: "Es una medida congruente con lo que han dictado las autoridades competentes de aquellos países que tienen zonas de riesgo. No se entendería que allí se disputen estas competiciones a puerta cerrada y que en nuestros países se desplacen contingentes de aficiones de estos países".

Esta es la explicación al porqué de esta decisión adoptada por las autoridades sanitarias de nuestro país y respaldadas por el propio CSD. Realizar estos partidos a puerta abierta supondría "abrir" las puertas a los aficionados que provienen de estas zonas de riesgo facilitando la expansión del virus en nuestro país. Tanto en Valencia como en Getafe. 

Es más, según fuentes consultadas por SPORT, es la medida más lógica considerando que no se paraliza la competición y que no pueden impedir la libre circulación de ciudadanos en Europa, porque esto supondría vulnerar el acuerdo de Sghengen que fija la libertad de fronteras. Cerrando los estadios impiden cualquier posible contagio de ahí que la medida sea global.

Esto explica también por qué el Ministerio de Sanidad sí autoriza la disputa de lo otros dos partidos europeos que implican a los equipos españoles e italianos. Se trata del Barcelona - Napoles de vuelta de la Liga de Campeones previsto para el 18 de marzo, así como el Sevilla- Roma que se disputa siete días antes, el 12 de marzo. A diferencia de lo que sucede con el Valencia y el Getafe, ni Nápoles ni Roma están de momento dentro de las zonas de riesgo reconocidas por el gobierno italiano. Esto explica que el Ministerio de Sanidad no haya incluido estos dos encuentros entre los eventos deportivos que deben disputarse a puerta cerrada.

El hecho de disputarse a puerta cerrada y no dejando entrar ni siquiera a la afición local del Valencia y el Getafe se explica desde el punto de vista inicial de evitar que pudieran entrar aficionados de las zonas afectadas. Aunque, según fuentes consultadas por el diario SPORT; habría formas de controlar con los abonos a la afición local o también los controles de temperatura en los exteriores a estos aficionados del equipo de casa para evitar ante cualquier indicio que entre al estadio.

Al tratarse de zonas de riesgo italianas, esto explica también por qué de momento no se ha planteado la disputa de ningún partido de la liga española a puerta cerrada. Desde el Ministerio de Sanidad y así lo ha confirmado la propia Secretaria de Estado para el Deporte, Irene Lozano, en el estado español no hay todavía una zona de riesgo que obligue a adoptar estas medidas en las competiciones que se juegan en nuestro país.

Desde UEFA, y según fuentes consultadas por el SPORT, por ahora no tienen nada que decir al respecto, salvo que están en contacto con todos los clubes y autoridades y, si hubiera que hacer algún anuncio, se hará en su debido tiempo.