Fran Canal: "La nueva Ley del Deporte puede hacer un daño a LaLiga irreparable"

El director general de Osasuna es uno de los 39 clubs que se oponen al nuevo marco legislativo

"Los clubs pueden tener graves problemas de supervivencia", asegura a SPORT Canal

Ivan San Antonio

Ivan San Antonio

Fran Canal, director general de Osasuna, uno de los 39 clubs en contra de la nueva Ley del Deporte, atiende a SPORT desde Girona, donde los navarros se han enfrentado este fin de semana al conjunto catalán. El ejecutivo asegura que los cambios introducidos en el texto legislativo pueden cambiar el ecosistema del fútbol en España y provocar consecuencias muy perjudiciales para el desarrollo de LaLiga.

La Ley del Deporte es del 90. ¿Era necesaria una nueva?

Cuando se redactó la anterior Ley nadie podía prever cómo ha cambiado el mundo. Es indiscutible que los derechos comerciales y audiovisuales han pasado a un plano muy importante y entonces no estaban ni previstos. 

¿Del primer borrador del texto al actual ha habido cambios por presiones?

Durante los últimos años se ha judicializado permanentemente cualquier decisión que toma LaLiga y el Real Madrid plantea demandas frecuentemente. Con el redactado de la antigua Ley y el Real Decreto de 2005, todas esas sentencias han dado la razón a LaLiga, que es el ente que garantiza que la competición crezca y se desarrolle. Con el nuevo redactado se pone en duda que los derechos comerciales del fútbol como colectivo pertenecen a LaLiga y los pueda gestionar.

Ya.

Eso llevaría a que los clientes que tiene LaLiga puedan encontrarse ante una inseguridad jurídica. Además, todos los equipos, gracias al actual estatus, somos verdaderos contribuyentes cada uno en su territorio. En Osasuna pagamos 33 millones de euros de impuestos en el último año. El negocio supone 1,4% del PIB español. No tiene sentido que esto cambie.

¿Qué suponen estos cambios?

Desde el momento que tenemos un redactado menos seguro puede haber cambios en las sentencias de los procedimientos abiertos y esto generaría inseguridad a los patrocinadores. Obligaría a tener menos ingresos, a cerrar su estructura comercial y de márqueting... Iríamos hacia la pobreza. Podrían caer más de 900 millones al año y los equipos podrían tener graves problemas de supervivencia.

¿Qué pasaría con CVC?

CVC introdujo una cláusula si había modificación en las condiciones del acuerdo y habría que devolver los 1.000 millones durante 15 años, 70 al año en vez de ingresar 1.000 más.

¿Este es un capítulo más de la guerra Tebas-Rubiales?

Lo que pedimos es que el estatus comercial de LaLiga no varíe. En el fondo, Rubiales gestiona las categorías no profesionales, las dos profesionales las gestiona LaLiga en base a esa Ley del año 90, pero pedimos que clarifique que los derechos comerciales conjuntos solo tenga capacidad de gestionarlos LaLiga. Con la nueva redacción podría no ser necesario consultar a LaLiga. Es aberrante.

La tendencia en Europa va hacia la protección de las ligas nacionales, con vetos legales a que los clubs puedan participar en competiciones no organizadas por la UEFA o la FIFA.

La RFEF es una federación asociada a la UEFA y la FIFA. Existen pocos deportes que tengan organismos rectores diferentes en conflicto. No tiene ninguna lógica. Hay que seguir un mandato común.

¿No atenta este veto contra la libre competencia?

No, a ti nadie te obliga a jugar LaLiga, pero si juegas aquí tienes derechos y obligaciones.

De los fundadores de la Superliga nadie se da de baja.

A día de hoy, en la Superliga solo son tres.

¿Qué espera de la sentencia del TJUE sobre la Superliga?

No nos cabe en la cabeza una resolución que no sea favorable a la FIFA y la UEFA. Tienen razón de ser en cuanto son las asociaciones que engloban a todas las federaciones del mundo y lo demás serían competiciones privadas de personas privadas, con torneos privados.

FIFA, UEFA y RFEF también son entes privados.

Son entidades privadas que regulan un derecho público. Aunque su naturaleza sea privada, regulan actividades públicas. La normativa se aprueba en asamblea, pero tiene que pasar por el CSD: no se escribe ninguna modificación de la normativa si no lo aprueba el CSD.

¿Están preocupados?

Mucho. Pedimos sensatez. Todos los grupos políticos tienen que saber a la hora de votar que el daño que les podrían hacer a todos los equipos del fútbol español, seria prácticamente irreparable.