Forsberg transforma Suecia a base de gol

El atacante sueco ha explotado finalmente con su selección. Con 3 goles en 3 partidos, empatado con grandes nombres como Wijnaldum, Lukaku y Lewandowski, solo Cristiano Ronaldo (5) y Schick (4), la revelación del torneo, lo superan en la tabla de goleadores.

A sus 29 años, Forsberg ha cogido la experiencia necesaria para soltarse y erigirse definitivamente en el arquitecto del ataque sueco. “Quizás antes me preocupaba más por forzar las situaciones, ahora dejo que vengan a mí. Estoy más tranquilo, relajado y seguro”, explicó el jugador del Leipzig, que admitió que en este proceso de maduración y aprendizaje, dejarse aconsejar ha sido fundamental.

“Antes me ponía mucha presión, me tenía que salir todo perfecto. Ahora me siento más en armonía y no pienso tanto. Esta es una mejor versión de mí mismo”.

Su participación no peligra

Y es precisamente esta mejor versión de Forsberg uno de los argumentos de la hinchada sueca para ver a los suyos en cuartos.

Es por eso que las alarmas se dispararon el sábado cuando el delantero se entrenó a parte por culpa de unas molestias que no le impedirán perderse el decisivo choque de mañana. “Solo fue una medida de precaución. Estoy bien y ya me he vuelto a entrenar a tope”, explicó a la vez que se mostraba confiado en las posibilidades de su equipo pese a las críticas recibidas por su juego. “Sabemos que tenemos calidad y que podemos ganarle a cualquiera”.

Berg se reivindica

En la misma línea habló Marcus Berg, que fue relegado al banquillo en el último partido ante Polonia para dar entrada a Robin Quaison. "Hay una competencia muy dura, pero eso es muy positivo. Solo me centro en entrenarme y en prepararme lo mejor posible", afirmó.

Y es que en el mismo partido, Dejan Kulusevski, otro suplente y ausente los dos primeros partidos por dar positivo en coronavirus, dio dos asistencias en solo media hora saliendo del banquillo.

“Siempre quieres jugar, quieres involucrarte y contribuir. Pero a veces te quedas al margen y tienes que aceptarlo y tratar de encontrar nueva energía”, reconoció un Berg que hasta ahora era uno de los favoritos del técnico Janne Andersson.

Con él en el banquillo, el atacante había sido titular en 36 de los 41 partidos hasta el partido de Polonia. “Todos los que están aquí esperan jugar. Yo también. Y me preparo como si fuera a jugar, luego ya veremos”, concluyó.

Confianza ciega en Isak

Quién está fuera de cualquier duda es Alexander Isak. El jugador de la Real Sociedad es titular indiscutible en el equipo de Andersson pese a que se le sigue resistiendo el gol, un hecho al que Berg le quita importancia.

“Está claro que un gol significa mucho, pero si ganamos partidos, él estará igualmente feliz. Y debería estar orgulloso del trabajo que ha hecho en cada partido. Vuela hacia adelante en el campo y sabemos que puede decidir partidos, así que los goles ya llegarán”.