Resarcir el fatídico penalti de Riquelme 16 años después

El Villarreal quedó eliminado frente al Arsenal en la semifinal de Champions de 2006 por tan solo un gol

El encuentro ha sido, hasta la fecha, la única vez que los 'groguets' han disputado la ronda de dos supervivientes de la competición continental

Resumen, goles y highlights del Villarreal 0 - 0 Arsenal de la vuelta de la semifinal de la Champions League 2005/06

Resumen, goles y highlights del Villarreal 0 - 0 Arsenal de la vuelta de la semifinal de la Champions League 2005/06 /

Laia Cervelló

Laia Cervelló

Tomó aire. Se acercó al punto de penalti sin levantar la mirada del suelo, notando como todo el peso de la responsabilidad caía sobre su espalda. En sus ojos, a caballo entre la preocupación y el poco convencimiento, se presagiaba el aciago final. Era el minuto 88’ y podían encontrar recompensa a un partido luchado. En Londres, el Arsenal había ganado la ida con un solitario gol de Kolo Touré y en Villarreal el marcador señalaba un esperanzador 0-0. Acceder a una prórroga que tenía como premio llegar a la final de la Champions no parecía tan complicado después de que el silbido del árbitro hubiera señalado pena máxima a favor suyo.

Once metros lo separaban del cielo. El argentino cogió carrerilla, lanzó un disparo ligeramente desviado hacia la derecha que Lehmann pudo detener sin problemas. Juan Román Riquelme no se lo podía creer. Tampoco la muchacha de suéter rojo cuyo derrumbamiento y tristeza quedarán para siempre registrados en los resúmenes del dichoso partido. Ni los llantos desesperados de Fernando Roig en el palco de El Madrigal.

Era el fin y todos eran conscientes. Dos minutos más tarde, el argentino se mordía el cuello de la zamarra conteniendo sus emociones para que las cámaras no pudieran captar sus ganas de llorar. El billete sería para el Arsenal. Los ‘groguets’ no sabían todavía que un equipo español se encargaría de vengarles semanas después en París.

Ese 25 de abril de 2006 el submarino amarillo hizo la inmersión más profunda de la historia del club en la máxima competición continental, pero no logró culminarla plantándose en la final. Un agrio recuerdo que todavía perdura en jugadores, presidente y afición. También en Pellegrini, que aterrizó en España como técnico para entrenar el primero de muchos equipos españoles y que afirmó tras el partido que “estaba convencido de entrar en la final”.

Fue su primera vez en semifinales y la única hasta ahora. Dieciséis años más tarde, y con la pasada Europa League luciendo en las vitrinas del club, repetirán después de haberse vestido de matagigantes eliminando un Bayern que no hace tanto plantó ocho goles al Barça.

El Villarreal va a repetir la hazaña, con una oportunidad ante sí: Resarcir una de las noches más agridulces. Darle un final feliz a los ‘groguets’ que sufrieron en El Madrigal o a través de la pantalla del televisor. Quizás esta vez Fernando ya no tendrá que llorar con la cabeza gacha entre las piernas agarrado de la barandilla del palco. Quizás la muchacha del suéter rojo podrá saltar y abrazarse a su entorno mientras su equipo vuelve a hacer historia. Quedar en la memoria como un equipo campeón de Champions y no, como diría Emery, ser recordados "por la pequeña aldea de la antigua Galia" que logró colarse en semifinales

Pero antes tiene que esperar a conocer su rival que, con toda probabilidad y si no salta la sorpresa, volverá a venir de Inglaterra.