Maguire y Onana silencian a los críticos y el United resucita

A veces se la quitan, pero hoy Maguire y Onana dieron vida al United. Irregulares como pocos, criticados sin reparo pero claves en la victoria del Manchester United ante el Copenhague que deja a los 'red devils' a un punto del Galatasaray que, pese a perder ante el Bayern, seguiría clasificándose para octavos de final. Victoria milagrosa y los de Old Trafford que resucitan.

El City visita por primera vez a un Young Boys férreo en casa

El United llegaba al encuentro tras haber recuperado sensaciones en sus últimos dos partidos de Premier League donde vencieron a Sheffield y Brentford pero esa mejoría no se notó en el arranque de partido. El Copenhague, que también se jugaba sus opciones de seguir peleando por estar en octavos de final, salió con dos o tres marchas más que los 'red devils'.

Solo hay que ver las facilidades con las que Achouri saca un disparo a los pocos segundos del pititdo inicial o el balón al palo que manda Diogo Gonçalves, tras un grave error de Maguire, y el posterior remate fuera de Elyounoussi como avisos del conjunto danés que mereció adelantarse en Old Trafford en los primeros compases de partido.

De hecho, la primera aproximación del United no llega hasta el primer cuarto de hora, con un remate de Hojlund que se marchó arriba. Fue el punto de inflexión para que el conjunto de Ten Hag recuperar el control del partido con el paso de los minutos aunque el entramado defensivo del Copenhague no dejaba crear ocasiones claras a los 'devils'.

El choque tomó otro ritmo tras el paso por los vestuarios. El orden se volvió en más descontrol, en ambas áreas. Porque todo pudo cambiar si Onana no saca una gran mano a Lerager en otro disparo desde la frontal del área. A partir de ahí, el Manchester se hizo amo y señor del encuentro.

Eriksen, Rashford, un mano a mano de Garnacho que entró desde el banquillo y que hizo un último toque demasiado largo cuando ya se celebraba el gol... Sucesión de ocasiones que fueron teloneras del testarazo de Maguire para adelantar a los de Ten Hag. Lo celebró con rabia, no marcaba desde febrero de 2022, el siempre criticado central inglés.

Tuvo el United como para rematar el partido pero les gusta sufrir. Hasta el último suspiro. El conjunto danés pudo empatar en la última jugada del partido, en el último suspiro, con un penalti absolutamente innecesario de McTominay. Pero ahí le tocó el turno de reivindicarse a Onana. Mano milagrosa y victoria salvada. La victoria de los criticados.