Sergi: "Cubarsí y el resto de jóvenes deben saber que lo más difícil viene ahora, mantenerse"

Sergi Barjuan (Les Franqueses del Vallès, 52 años), exjugador y exentrenador del FC Barcelona, es actualmente el director deportivo de las Barça Academy, las escuelas que el club azulgrana tiene por todo el mundo. Aprovechando la Semana Santa, se disputa en Barcelona la undécima edición del Mundial de dichas academias y el que fuese lateral izquierdo del 'Dream Team' está muy pendiente de todo lo que pasa.

Aleix Garcia tiene ya otras ofertas

¿Qué representa para el club todo lo que se está viviendo estos días en Barcelona?

Para la Barça Escola, que es la organizadora de este evento, es lo máximo que podemos ofrecer a los niños. Una gran experiencia en Barcelona, en la Ciutat Esportiva, donde entrena el primer equipo. Los niños se ven importantes y pueden disfrutar de otras culturas, relacionarse con otros niños que juegan con la misma metodología que ellos. Durante cuatro o cinco días pueden vivir grandes experiencias para llevarse a casa.

Es el director deportivo de las Barça Academy. ¿Cuáles son los objetivos además del económico?

Intentamos educar a los niños con nuestra metodología y la experiencia que tenemos. Les transmitimos todos los valores del Barça, esfuerzo, equipo, respeto. Ayudar a los niños a que se hagan humanamente grandes a través de los directores de las academias que están formados aquí y de los entrenadores locales.

Se intenta exportar ese ADN Barça.

Se intenta exportar la metodología Barça, después cada país tiene su forma de ver el fútbol, de plasmarlo de forma diferente y tienes que adaptarte a cada país. Ya no solo a nivel futbolístico, también culturalmente. No es lo mismo Japón que Estados Unidos o la India.

Y también se exporta la marca Barça. Todos los niños deben ser del Barça.

Exportar la marca Barça es muy fácil porque es muy grande. Lo más difícil es mantener esa popularidad en el niño y en la familia. Nuestro trabajo también es que cuando entren en la Academia, fidelicen su barcelonismo. Que se hagan socios, que vengan a Barcelona a ver al Barça. Es un objetivo que el niño y la familia se sientan culés desde que entran en la Academia y lo sean ya para toda la vida.

Hay futbolistas profesionales que llevan a sus hijos a las academias. El hijo de Dzeko está en la de Estambul. ¿Qué quiere decir eso?

Es el reconocimiento del trabajo bien hecho. Intentamos que en todo el mundo se reconozca nuestro método futbolístico y humano. Para futbolistas que han vivido el auge del Barça desde la llegada de Cruyff hasta ahora, es una garantía. Saben que les damos unos valores a los niños para, si un día no pueden ser futbolistas, tengan una buena vida.

Sergi Barjuán nos explica cuál es la labor de la Barça Academy

¿Tanta materia prima puede hacer que el Barça pueda beneficiarse con algún jugador?

Aquí tenemos un problema. La normativa FIFA es muy contundente y es imposible traer el talento para aquí antes de tiempo.Mi reto es que los niños que lleguen, cuando se vayan, sean mejores, que tengan la posibilidad de vivir del fútbol. Retener el talento es difícil, pero hay que ver como podemos conseguirlo. A veces, traemos aquí niños para entrenar con nuestros equipos y eso hace que se sientan valorados y crean en nosotros. También hay programas, como el Tècnic Camp, en los que traemos aquí todo el talento y están diez días en un campus de perfeccionamiento. Así los podemos controlar y fidelizar.

Algún caso ha habido. Julián Araujo estuvo en una Barça Academy. ¿Debe haber más casos como el suyo?

El objetivo es lograr el máximo talento. No es fácil retenerlo por las normativas, pero estamos buscando soluciones para lograrlo. Nos sentimos satisfechos con que muchos jugadores se estén ganando ya la vida con el fútbol y si seguimos trabajando así, serán muchos más. Todo esto nos llena. Debemos pensar también que llegar al Barça es muy difícil, no solo para los niños de las academias.

De la Barça Escola hay más ejemplos. Eric Garcia, Jana...

Se están haciendo bien las cosas y vamos de la mano del fútbol formativo. Ya se hace también una selección para lograr talento y que después pasen de la Barça Escola al fútbol formativo. Es fácil hacerlo porque convencemos con el método. Las cosas se están haciendo muy bien y nos dará muchos regalos. Llegar al primer equipo ya es otra cosa porque es muy difícil.

Dice que llegar al primer equipo es muy difícil. Ha sido padrino de esta edición Pau Cubarsí, que acaba de llegar. ¿Le ha dado algún consejo?

Coincidimos en la presentación. Está en una nube. Ya le dije que debe aprovechar el momento, pero debe saber que lo más difícil viene ahora, que es mantener este nivel. Tiene 17 años, hay que ayudarle mucho, estar muy encima y entender que puede tener bajones. Entonces sabrá lo que es la élite. Estar rodeado de jugadores como Gavi o Pedri le va a ayudar.

Cubarsí, Lamine, Fort, Guiu...

Se habla poco del gran trabajo que se está haciendo en el fútbol formativo de la mano de Alexanko y Toni Hernández. Es el granito de arena más importante para que puedan llegar al primer equipo. No es normal que chicos tan jóvenes lleguen al primer equipo del Barça, pero que estén llegando con esa edad y sean tan maduros es gracias al gran trabajo del formativo. Poder vivir esto hace que los que están en el formativo se autoexijan cada día más porque saben que pueden llegar, que la puerta está abierta.

¿Con esta edad hay que ir con mucho cuidado o si son buenos a jugar en el primer equipo?

Eso te lo marcan los tiempos. Lo digo por experiencia. Yo llegué porque se lesionaron Goiko y Juan Carlos. El jugador debe estar preparado para el momento en el que le llegue la oportunidad. Y después debe mantenerse. Aquí entra una buena gestión mental y física porque la exigencia es muy diferente.

También es importante que el entrenador del primer equipo apueste por ellos, como está haciendo Xavi.

Todos los entrenadores que llegan al Barça deben entender la cultura Barça. Hubo un momento que el Barça jugó con once jugadores de la cantera. Los entrenadores deben saber que deben contar con el formativo porque se trabaja muy bien.

Usted fue el entrenador del primer equipo entre Koeman y Xavi. ¿Cómo lo ve?

Ha pasado mucho tiempo. Llegué porque había problemas. Estuve tres partidos y creo que lo superamos con éxito, sobre todo en el partido de Champions. El equipo ha evolucionado, ha cambiado mucho, de jugadores, han subido futbolistas del formativo. En un proyecto a largo plazo, se está viendo esa evolución.

¿Debería seguir Xavi?

No es una decisión mía. Yo digo que los proyectos cuanto más tiempo tienen para evolucionar, mejores son.