Lo mejor y lo peor

El semáforo del Celta-Barça

Claudio Bravo, Gerard Piqué y Jérémy Mathieu fueron algunos de los futbolistas más destacados del Barça en un partido en el que los de Luis Enrique carecieron de pegada y tuvieron problemas en la elaboración del juego

El semáforo del Celta-Barça

El semáforo del Celta-Barça / sport

Alfonso Callejas

ROJO: MEDIOCAMPO SIN RUMBO

El Barça volvió a demostrar en Balaídos que sigue alejándose paso a paso, semana tras semana, de la hoja de ruta que tanto caracterizó a su juego de los últimos años. En tierras gallegas el mediocampo azulgrana prácticamente desapareció, dando paso a un fútbol cada vez más vertical en el que tuvo un papel protagonista Sergio Busquets para equilibrar las líneas cuando el equipo carecía de gobierno en la medular por la discreta participación de Rafinha e Iniesta. Afortunadamente, la entrada de Xavi por el menor de los Alcántara en la segunda mitad cambió poco a poco el guión hasta el pitido final.

ÁMBAR: TRIDENTE SIN PEGADA

El cambio de estilo del Barça de Luis Enrique ha provocado que el equipo sustente buena parte de su éxito en el enorme potencial de su tridente estrella. En Balaídos tanto Suárez como Neymar e, incluso, Messi tuvieron un papel bastante discreto. El uruguayo se perdió en su particular pelea con los centrales y <strong>algunos encontronazos con el colegiado</strong>, mientras que Neymar volvió a rendir por debajo de sus posibilidades -lejos del nivel exhibido con Brasil durante el parón de selecciones- y Messi, que reaparecía tras sus molestias en el pie, se quedó a las puertas del gol en varias ocasiones claras. 

VERDE: EL EJE DE LA DEFENSA

La nota más positiva del partido que el Barcelona disputó en Vigo fue constatar que el equipo se hace fuerte en la que en los últimos años parecía su zona más vulnerable: el eje defensivo. Piqué volvió a confirmar que está de dulce y cuajó un partido destacable, junto a un Mathieu que fue decisivo una semana más tanto en defensa como en ataque, donde demostró que el juego a balón parado y la pizarra del 'staff' técnico ya es una seria alternativa para desatascar partidos. Su gran trabajo se vio acompañado por una soberbia actuación de Claudio Bravo, que apareció de forma clave en la primera media hora para salvar dos goles cantados de Larrivey y Nolito.