El Barça más alarmante salva los muebles ante el colista

El Barça no disipó dudas contra el colista Almería, más bien las aumentó, pero al menos logró salvar los muebles gracias a que el capitán Sergi Roberto salió al rescate de un equipo que generó múltiples ocasiones tras el descanso pero que fue un desconcierto atrás y acabó pidiendo la hora. Mucho que reflexionar en el parón navideño.

El 1x1 del FC Barcelona ante el Almería al descanso

Xavi no tuvo mucho margen de maniobra en el centro del campo por las bajas de Gavi, Pedri y De Jong, y optó por ubicar a Gündogan en el privote y a Fermín y Sergi Roberto en los interiores. En defensa, laterales ofensivos con Joao Cancelo y Balde, y Christensen para acompañar a Araujo en el eje. Y arriba, el tridente esperado con Raphinha, Lewy y Joao Félix.

Ambiente desangelado pero mejor respuesta de la esperada y un Barça sin chispa ante un Almería parapetado con defensa de cinco y líneas muy juntas. Y aun así, con lagunas que explican su posición de cola. Lo pudo comprobar Sergi Roberto a los 8 minutos, cuando increíblemente se quedó sin marca dentro del área en un córner. Raphinha lo vio y el capitán cabeceó fuerte pero centrado a las manos de un ágil Maximiano.

El Almería se lo empieza a creer

El colista tardó 12 minutos en darse cuenta que le podía hacer daño al Barça. Baba probó un disparo que salió desviado y en la siguiente acción, Araujo se lio de forma incomprensible y menos mal que no lo aprovechó Ramazani.

Sobre el césped, dos equipos con objetivos distintos pero ambos muy necesitados. Y se reflejó en un juego de los que realmente no hacen afición. Ni que fuera por los valientes que subieron a Montjuic había que poner una marcha más. Porque la lentitud en la creación fue desesperante. Muy pocas ideas y mucho tocar y tocar sin encontrar desmarques.

Una posesión larguísima del Almería a los 28 minutos motivó que afloraran los primeros silbidos en la grada. El colista ni se creía que pudiera avanzar sin ser presionado.

Raphinha evita males mayores

Cuando la tensión ambiental no auguraba nada bueno, el Barça logró avanzarse a balón parado. Gündogan sacó un córner, cabeceó Araujo y el rechace de Maximiano lo recogió Raphinha para marcar. Lo 'celebró' llevándose los dedos a los oídos.

Un gol que pudo tener continuidad si poco después, Lewandowski, en su primera ocasión, y muy clara, hubiera acertado ante un Maximiano que se volvió a lucir.

Empata el Almería con suspense

Para no estar fino, ya no lo está ni Araujo. Segundo error y éste sí costó caro. Rechazó mal un pase en largo y después fue el que rompió el fuera de juego por milímetros ante un Baptistao que definió a la perfección ante Iñaki Peña. El uruguayo reclamó con vehemencia posición adelantada del delantero rival en la primera jugada.

En pleno desconcierto, el propio Baptistao estuvo cerca del segundo a chut cruzado. Volvieron los pitos, así que lo mejor fue llegar al descanso.

El Barça mejora la actitud pero se repite la historia

Ferran y Koundé entraron por Joao Félix y Christensen en la reanudación. El 'tiburón' le puso intensidad y puso a prueba a Maximiano solo empezar. Lewandowski tomó ejemplo y también se activó. Fuerte disparo para otra estirada espectacular del meta portugués del Almería no dio opción.

Marcando los tiempos como en las mejores épocas de Lewandowski. Pero no, no fue el polaco. Fue el capitán Sergi Roberto quien cabeceó de forma impecable el saque de esquina botado por Raphinha para volver a adelantar al Barça cuando volvía a dar síntomas de nerviosismo.

El 2-1, que llegó a través de un córner que no se debió señalizar, tampoco aportó la tranquilidad definitiva a los azulgranas. A Lewy se le continuó negando el gol y en la otra área, falta de entendimiento fatal entre Iñaki Peña y Araujo en el salto y Edgar que solo tuvo que empujarla. A seguir remando.

El uruguayo trató de arreglarlo al instante con un gran cabezazo que salió fuera por muy poco. Una lástima.

Lo que fallaron Lewandowski y Gündogan en la misma acción ya pareció cosa de brujas. Increíble, el Barça entraba en la recta final empatando contra el colista.

El coraje del capitán

Tuvo que volver a aparecer Sergi Roberto, el héroe inesperado de la tarde, para aprovechar un precioso pase en profundidad de Lewandowski y superar a Maximiano. Se merecía el capitán una actuación así, como también fue una recompensa para Iñaki Peña salvar al equipo de un tercer gol a cabezazo de Baba. Hubiera sido un mazazo muy grande.

El travesaño impidió el hat-trick de un heroico Sergi Roberto. Pero atrás el Barça fue un equipo descosido y sumó tres puntos con sangre, sudor y lágrimas que cierran el año con enormes dudas.