Rakitic-Barça, ruptura total

Rakitic explica que la plantilla del Barça sigue muy unida a pesar de confinamiento

Rakitic explica que la plantilla del Barça sigue muy unida a pesar de confinamiento / EFE

Ivan San Antonio

Ivan San Antonio

Si la historia entre el Barça e Ivan Rakitic acaba bien, será un milagro. A día de hoy, las relaciones pasan por su peor momento desde que llegó en junio de 2014. Han pasado casi seis años desde entonces y el jugador está, económicamente, más que amortizado. Sin embargo, su etapa como blaugrana ha llegado al fin tras una temporada en la que no contó para Ernesto Valverde y tampoco lo ha hecho con regularidad tras la llegada de Quiquie Setién. Toca sentarse a buscar una salida digna para todas las partes, pero las posiciones son tan lejanas que el acuerdo es prácticamente inviable. La guerra está servida y el internacional croata, con un contrato firmado hasta el 30 de junio de 2021, tiene ahora mismo la paella por el mango.

POSTURAS ANTAGÓNICAS

La táctica de Rakitic es sencilla:_dejar pasar el tiempo en busca de una salida benefociosa para él a nivel económico. Las razones que, según fuentes internas, han llevado hasta ahí al jugador tienen que ver con una hipotética promesa de mejora de contrato que en su día le habría hecho el Barça y que nunca ha llegado. A Rakitic solo le contempla una renovació  de blaugrana. Fue en marzo de 2017, tres años después de llegar al Camp Nou. Entonces firmó hasta 2021. Desde entonces, nada. Muchas conversaciones y poca chicha. Hasta que las conversaciones han quedado, tan solo, en muestras de educación por parte de todos, sin ninguna intención de llegar a un pacto. El Barça quería venderle y el jugador tiene sus propios planes. Posturas absolutamente antagónicas.

OFERTAS RECHAZADAS

El Barça ni quiere ni puede forzar a nadie a tomar una decisión que no le complazca, pero a tomar una decisión e contra de su voluntad. Eso está claro. Pero sí tiene la obligación de encontrar aquello que más se ajusta a sus intereses. En ese sentido, trasladó en verano del año pasado una oferta a Ivan Rakitic realizada por el PSG que parecía irrechazable, pero no lo fue porque el jugador prefirió seguir vinculado al Barça. El pasado mes de diciembre llegó a las oficinas una oferta de 42 millones de euros desde Italia. La Juventus sería el club que más cerca estuvo de convencer al croata, aunque desde el Barça están convencidos que en ningún momento hubo opción alguna para los italianos. Simplemente, Rakitic no ha querido moverse porque su única intención es regresar al Sevilla. Eso es lo que comentan en las oficinas blaugranas. Pero de tal manera que el Barça no vea un duro.

PULSO MUY DURO

Las relaciones entre el Barça y el futbolista están muy tocadas porque el croata manda y depende de él que el club pueda obtener algún tipo de beneficio económico por su marcha, que se producirá cuando el jugador así lo desee. Su intención es regresar al Sánchez Pizjuán porque, además, allí tiene casa y su esposa es sevillana. Pero el Sevilla no quiere pagar traspaso, así que, en este momento, la probabilidad más alta es que el jugador fuerce para marcharse a coste cero durante el próximo mes de enero, mediada la temporada 2020-2021. Será entonces cuando, a falta de media temporada para finalizar su contrato de blaugrana, tenga libertad para negociar con quien quiera. El Barça, en ese caso, solo se ahorraría los emolumentos del jugador correspondientes al periodio que va entre enero y junio de 2021. Y es que, cuanto menos traspaso pague el Sevilla al Barça (la intención es que sea cero), más podrá ganar el internacional croata en prima de fichaje.

Las dos partes se encuentran en un callejón sin salida y Rakitic ya se ha pronunciado al respecto:_“Yo decidiré mi futuro, no soy un saco de patatas”, dejando muy claro que manda él y que el Barça no tiene nada que decir al respecto.