Octubre de 2022. El VAR revisa un empujón (bastante claro) de David García sobre Benzema. El central trastabilla al delantero galo justo cuando se dispone a definir ante Sergio Herrera. Desde la sala del VOR deciden señalar penalti. Lógicamente, nadie en el madridismo rechistó ni clamó al cielo. Básicamente, porque la acción era más o menos evidente. Y porque beneficiaba a sus intereses, claro.

El Gündogan culé ya se acerca al citizen

Ayer, en el Estadio Gran Canaria, se produjo una acción casi calcada. Empujón de Sinkgraven, que hacía poquito que había entrado en el terreno de juego relevando a Álex Suárez, suficiente como para desestabilizar a un Ilkay Gündogan que se relamía para rematar de cabeza, casi sobre la línea de gol, un rechace de Valles tras disparo durísimo de Joao Félix. Una pena máxima que ha provocado una reacción airada por parte del madridismo (y, lógicamente, buena parte de la afición de la UD Las Palmas, la gran perjudicada).

Gündogan apareció, por fin, en el momento oportuno

Pero la acción fue pitada al instante por González Fuertes y el VAR no entró a corregir la infracción señalada por el colegiado. El propio Gündogan se lo guisó y se lo comió para dar el triunfo en el 93’.

VARIAS JUGADAS CALCADAS

Pero esa jugada que mencionábamos inicialmente de David García sobre Benzema no es la única que, de alguna forma, deja en evidencia las críticas del madridismo. Hay otro precedente con Dani Carvajal como protagonista que también ‘retrata’ esas quejas de la afición blanca. Partiendo de que siempre que haya decisiones más o menos polémicas en ambos bandos siempre habrá madridistas y barcelonistas en ambos bandos clamando al cielo. Forma parte del ‘circo’.

La otra jugada a la que nos referimos con Carvajal de protagonista no es la del último gol de Rüdiger, donde el lateral blanco hace una pantalla totalmente ilegal para permitir el remate limpio del central. Raíllo, impotente, no puede llegar a despejar.

DOS ACCIONES CLAVE EN CHAMPIONS

La acción con empujón similar a la de ayer fue en 2021, en la ida de las semifinales de Champions contra el Chelsea. Ben Chilwell iba a recibir un balón largo dentro del área y Dani, de manera descarada, lo empuja y le hacer perder el equilibrio. Ni Makkelie ni el VAR deciden intervenir ante tan clamorosa acción.

Y aún hay otra bastante clara. El propio Iturralde González, exárbitro, aseguró que era penalti. Eliminatoria de octavos de final Liverpool-Real Madrid. Los blancos ganaban 2-3 y Carvajal desestabilizaba claramente a Darwin Machís cuando este intentaba rematar de cabeza dentro del área. El lateral es un clásico de jugar con los brazos, al límite. O, como en estos casos, sobrepasándolo.