Los pecados capitales del proyecto de Laporta y Xavi

El proyecto ha fallado por diferentes aspectos de gestión y deportivos

Xavi cometió errores y la junta y Deco no le ayudaron demasiado

La declaración de Laporta sobre Xavi a los medios del Barça

FCB

Albert Masnou

Albert Masnou

El fin de Xavi es un momento para echar la vista atrás y repasar algunos detalles que han acabado dictando sentencia. Los dos primeros años fueron buenos, pero la deriva que cogía el tercero era pésima. No es normal quedarte fuera de todo en enero. Analicemos los errores cometidos en este proyecto, tanto por parte del entrenador como de la directiva.

1) Un mensaje equivocado. Poco realista en sus declaraciones postpartido, especialmente en los últimos meses cuando el juego del equipo era muy pobre y, por el contrario, sus apariciones posteriores estaban cargadas de optimismo. La afición no lo entendía. Solo cuando, tras el partido de Almería, cargó contra sus jugadores, Xavi recibió comprensión de la grada. El resto de apariciones fueron demasiado blandas hasta cansar a la afición. De aquí, al meme hay un paso. Su imagen de puertas afuera quedó empañada.

Lewandowski y los cambios 'calientes'

Lewandowski y los cambios 'calientes' / SPORT.es

2) Un vestuario roto. De la manera que en sus primeras temporadas el mensaje de Xavi llegó al grupo hasta convertirse en una familia solidaria, hoy el Barça es todo lo contrario, fruto de que su mensaje no llegó. La actitud defensiva es una muestra de que antes todos iban a una y hoy, cada uno va a la suya. Bastantes jugadores le dieron la espalda y comentaban en privado su deseo que Xavi se fuera. Xavi había perdido el grupo, especialmente a los jugadores más veteranos. 

3) Las trampas de la directiva. Xavi no marcó distancia con la directiva y esto le llevó a muchos errores. Laporta filtró que no le gustaba una alineación (Rayo Vallecano), le cambió una convocatoria (Amberes), traspasó a jugadores que el técnico quería (Dembélé se fue porque Deco siempre priorizó a Raphinha, representado suyo), fichó a jugadores que no quería (Joao Félix, por poner un ejemplo)... Tanto intrusismo acabó afectando su credibilidad dentro del vestuario. Xavi quedó pisoteado. Y su imagen de puertas adentro quedó empañada.

Joao Felix, durante el Barça - Villarreal

Joao Felix, durante el Barça - Villarreal / AP

4) Poco apoyado. A diferencia de cuando estaba Jordi Cruyff, Deco nunca fue un aliado para Xavi ni como puente con sus jugadores ni como freno a la directiva. Xavi perdió con la marcha de Jordi y se sintió más solo. Laporta llevaba mucho tiempo callado, signo claro de sus divergencias.

5) Mala gestión de los lesionados. Hoy, Xavi tiene hasta seis jugadores lesionados, más de la mitad serían titulares en el partido contra el Villareal. Vino asegurando que el Barça trabajaba mal y por eso Koeman tenía tantos lesionados y anuncia su marcha en las mismas condiciones.

Laporta, Deco y Xavi, en el vestuario del Barça

Laporta, Deco y Xavi, en el vestuario del Barça / FCB

6) Falta de recursos. Ante la decadencia del equipo, Xavi ni su staff han sabido encontrar soluciones definitivas para cambiar el rumbo del equipo. Las sustituciones durante los partidos tampoco acostumbraron a aportar soluciones. La configuración del equipo, ante la delicada situación económica, tampoco le ayudó en nada pues solo pudo recorrer a la cantera

7) Una salida extraña. Ayer decía que preparaba la próxima temporada y hoy anuncia su adiós a final de temporada. ¿Qué pasará si el equipo sigue en la misma dinámica en las próximas semanas? ¿Si cae fuera de los puestos de Champions? ¿Será más escuchado ahora dentro del vestuario, cuando los jugadores saben que no seguirá en el próximo curso? ¿Qué hará Laporta si el equipo va a menos? Muchas preguntas para los cuatro meses que quedan de temporada.