Koundé llena de razón a la teoría de Thomas Tuchel

El de este domingo fue un cumpleaños agridulce para Jules Koundé. Al menos en el aspecto profesional. Es cierto que el Barça ganó y el galo asistió a Lewandowski en el 1-1, pero lo ocurrido en el primer tiempo seguro que no dejó satisfecho al internacional francés, que sufrió más de la cuenta con Samuel Omorodion.

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Koundé inició el partido como central, posición que más le gusta, encargándose del marcaje del corpulento delantero del Alavés. Sin embargo, el español de origen nigeriano generó muchísimos problemas al zaguero azulgrana. Al margen del 0-1, que no fue precisamente culpa de Jules, Omorodion le ganó varios cuerpo a cuerpo a Koundé y hasta una carrera en la que el defensa partía con ventaja. Tantos fueron los apuros que pasó el galo que Xavi tuvo que optar por intercambiar las posiciones de Koundé y Araujo para anular al ariete del Alavés.

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En verano de 2022, cuando el Barça fichó al entonces jugador del Sevilla, era el Chelsea el que partía con ventaja para hacerse con sus servicios. Los 'blues' tenían incluso avanzadas las negociaciones con Monchi para sellar un traspaso que iba a rondar los 50 millones de euros. Sin embargo, el pensamiento de Thomas Tuchel, en aquel momento técnico del Chelsea, alejó al defensa de Stamford Bridge. Después, Xavi dio la puntilla y acabó de convencer a Jules.

Tuchel, reticente con la altura de Jules para jugar de central

A Tuchel le gustaba Koundé, pero tenía dudas de que pudiera responder como central ante los muchos delanteros con envergadura que hay en la Premier League. Para el entrenador teutón, el hecho de que Jules midiera 'solo' 1.80 metros le convertía más una opción para el lateral que para el eje de la zaga. Aquel Chelsea jugaba con dos carrileros y, de hecho, es ahí donde Tuchel quería alinear a Jules: en el carril.

El cabecilla del Barça es Lewandowski

Tuchel tenía dudas a la hora de pagar más de 50 millones por un jugador que consideraba más un complemento que un jugador estructural. Esa circunstancia la aprovechó Xavi para acabar de convencer a Jules, al que le prometió alinear como central y formar, junto a Ronald Araujo, una pareja ganadora.