Messi, garantía de gol

El FC Barcelona, si aspira a seguir peleando por la Liga 2020-21, está obligado a ganar esta noche al Levante en el Camp Nou. A ganar y a convencer, a dar un mensaje inequívovo a la afición de que mantiene las constantes vitales y que, después de dos derrotas consecutivas, vuelve al redil para pelear con todo y contra todos.

Y es que, cualquier otro resultado que no sea sumar los tres puntos en juego, dejará al equipo de Ronald Koeman en una situación preocupante. Más que nunca, los azulgranas están en manos de su capitán, Leo Messi, el único futbolista que ha ganado seis Balones de Oro y que, recientemente, ha sido nominado al premio The Best, de quien se espera otra de sus grandes noches.

Messi ha salido al rescate del Barça en cientos de partidos. Cuando el equipo ha necesitado al fenómeno de Rosario, allí ha estado el ‘10’ para echar una mano... o las dos si hacía falta. Goles, asistencias, arrastrar marcas, dejar pasar balones… La magia de Messi siempre ha estado presente en los momentos críticos y el actual lo es. El Barça viene de dos derrotas consecutivas (Cádiz y Juventus) y, con Leo, solo en dos ocasiones se vivieron tres seguidas (en 2014 y 2016).

Esperanza

Hay motivos históricos y actuales para agarrarse a Messi. De entrada, el crack argentino es el jugador de la Liga que más dispara a puerta (34 remates en 10 partidos) y el que más regatea (43). Es, también el máximo realizador del equipo de Ronald Koeman en el torneo doméstico, igualado con el ahora lesionado Ansu Fati, con cuatro dianas (dos de penalti).

En cuanto al rival, los números también abrazan a Messi en todos los sentidos: ha jugado once partidos contra el Levante en el Camp Nou y, además de ganarlos todos, ha anotado 12 goles y ha dado 10 asistencias. Una verdadera ‘bestia negra’ para el equipo ‘granota’, incapaz de frenar a un Barça con Messi en el coliseo azulgrana. De hecho, la estrella argentina, en todos los enfrentamientos con el Levante, solo ha perdido uno, el del 2 de noviembre de 2019 (3-1 en el Ciutat de València). En números generales, suma 21 partidos (18 victorias) y 22 goles.

Siempre se ha dicho que el césped del Camp Nou es algo así como el jardín de Messi. Por el espectáculo que ha dado desde hace más de una década, por los goles, por jugadas imposibles, por cualquier acción inesperada… Sobre el tapete verde del gigante ha firmado verdaderos shows, como el repóquer contra el Bayer Leverkusen en Champions League (7-1) en marzo de 2012, entre otros muchos partidos.

Insaciable

En el Camp Nou Messi reina prácticamente desde que debutó. En él ha jugado ya 365 partidos y ha firmado 378 goles, a un promedio de 1,03 goles por encuentro. Es una garantía de gol sin lugar a dudas. En partidos de Liga mantiene estos espectaculares números: ha jugado 248 duelos en el Camp Nou y ha convertido 262 dianas, a un promedio de 1,05 tantos por encuentro. En Champions ha jugado 70 (70 goles), en Copa 38 (35 goles) y en Supercopa de España, 9 (11 dianas).

Es cierto, y ahí están los números, que Messi no ha empezado la temporada con los mismos registros que otras campañas, pero en estos momentos es el pichichi del equipo con siete goles (cinco de penalti). Seguramente, si la lesión no lo hubiera frenado, el máximo realizador sería Ansu Fati (que se quedó con cinco goles), pero a un depredador como al rosarino nunca se le puede menospreciar. Sería un error. 

De los siete goles, el crack ha marcado seis en ocho partidos jugados en el Camp Nou. Solo dejó de anotar contra el Sevilla, Real Madrid y Juventus.

Este domingo, más que nunca, el Barça necesita que el capitán tire del carro y emita una señal a la afición, que anhela más que nunca que esté de vuelta y lidere al equipo en esta recta final de año para mantener viva la llama de la esperanza, tanto en la Liga como en la Champions y las otras dos competiciones que aguardan al Barça: Supercopa de España y Copa del Rey.